El pontífice animó al mundo a ser «símbolo tangible de esperanza» y pidió a los responsables políticos que durante el Año Santo promovieran «iniciativas de amnistía o de condonación»
Mascota Jubileo 2025. Foto: CNS/Justin Mclellan |
Como parte del
programa cultural previsto para esta importante cita se expondrá de forma
gratuita el cuadro White Crucifixion de Marc Chagall gracias a su
préstamo por parte del Art Institut de Chicago
A las 19:00
horas del 24 de diciembre, el Papa presidirá una Misa en la plaza de San Pedro
y, a continuación, procederá al rito de apertura de la Puerta Santa, que
siempre está cerrada y solo se abre en cada Jubileo, cada 25 años, o en sus
versiones extraordinarias. Será el primero en cruzar el umbral lo que marcará
el inicio del Año Santo, un momento especial en el que los católicos podrán
obtener la indulgencia plenaria. Dos días más tarde, el 26 de diciembre, el
Pontífice se trasladará hasta la cárcel romana de Rebibbia para repetir este
gesto en otra puerta como «símbolo de esperanza». Así lo ha explicado este
lunes el arzobispo Rino Fisichella, proprefecto del Dicasterio para la
Evangelización, Sección para las Cuestiones Fundamentales de la Evangelización
en el Mundo, en la rueda de presentación del evento en el Vaticano.
Las puertas
santas, como es tradición, estarán únicamente en las cuatro basílicas papales
de Roma —San Pedro del Vaticano, San Juan de Letrán, Santa María la Mayor y San
Pablo Extramuros— pero además el Pontífice extenderá a los presos este gesto de
gracia con la apertura de la puerta de este centro penitenciario de la capital
italiana.
Fisichella ha
detallado que —además de reclamar al Gobierno italiano más medidas de amnistía
para los presos— el 11 de septiembre «firmamos un acuerdo con el ministro de
Justicia, Carlo Nordio, y el comisario del gobierno, el alcalde Roberto
Gualtieri, para hacer efectivas durante el Jubileo formas
de reinserción en actividades de compromiso social» para los presos. De hecho,
en la bula con la que convocó el Jubileo, Spes non confundit, el pontífice
animó al mundo a ser «símbolo tangible de esperanza» y pidió a los responsables
políticos que durante el Año Santo promovieran «iniciativas de amnistía o de
condonación». Sin embargo, no se ha detallado de qué manera se llevará a cabo
en lo concreto.
El Jubileo
también ofrecerá varios eventos culturales a los 30 millones de peregrinos que
se espera lleguen a la capital. Antes del Jubileo se han organizado dos
conciertos: uno el 3 de noviembre de la quinta sinfonía de Dmitri Shostakóvich
ofrecido por la Orquesta de Santa Cecilia, y otro el 22 de diciembre, con el
coro de la Capilla Sixtina cantando varias composiciones de Palestrina en la
iglesia de San Ignacio de Loyola. Asimismo, según ha avanzado la Santa Sede,
desde el próximo 27 de noviembre y hasta el 27 de enero de 2025, se expondrá el
cuadro White Crucifixion de Marc Chagall en el Palacio Cipolla de
Roma, gracias a su préstamo por parte del Art Institut de Chicago (Estados
Unidos). Se trata de la primera vez que esta obra pintada en 1938 —un momento
de gran tensión en Europa— se expone en Italia.
El artista
ruso-francés utiliza colores vibrantes y formas abstractas para representar la
escena de la crucifixión de una manera emocional y evocadora. El comisario del
programa jubilar, Davide Mambriani, ha explicado que Chagall cuadro Chagall «ilustró la devastación de los pogromos» de la
historia y ha defendido que junto al Guernica de Picasso «representa
una de las más elocuentes condenas de la guerra y del odio del siglo XX». Por
otro lado, desde el 16 de diciembre y hasta el 16 de febrero de 2025 podrán
admirarse 18 «raros iconos» de los Museos Vaticanos en la sacristía de Borromini
de la iglesia de Santa Inés, en la céntrica plaza Navona de Roma. Además, la
tradicional exposición de los 100 Belenes en el Vaticano del 8 de diciembre de
2024 al 6 de enero de 2025 también se enmarca como iniciativa cultural en el
Jubileo.
Victoria Isabel Cardiel C.
Fuente: Alfa y
Omega