“Patas arriba”
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Con cada cambio
de Priora… Todo se pone “patas arriba”, empieza una nueva etapa para todas. No
solo pueden cambiar algunos oficios (enfermera, sacristana, maestra…), sino que
también lo hacen los sitios en el coro y en el refectorio (comedor), ya que estamos
sentadas por orden de profesión, y como la M. Priora pasa a presidir, todo
cambia.
Realmente, en
cuanto a los sitios, son cambios sencillos, o eso pensaba yo, pero después de
tanto tiempo haciendo lo mismo, me sentí desorientada. Tenía que ubicar las
cosas, las vistas eran diferentes, iba a coger algo o dar algo a una hermana y
me confundía de lado… Me di cuenta de todo lo que un pequeño cambio supone en
nuestra vida.
Los cambios
cuestan, ¡lo nuevo da vértigo! En clausura no eliges tu puesto de trabajo o
profesión… Se da según la misión que el Señor tiene para cada una de nosotras,
y de repente te descubres en lo que menos imaginabas. Compartiendo con otras
hermanas, está siendo común el vértigo ante lo desconocido; de alguna manera,
nuestra debilidad queda expuesta. ¡Cómo nos gusta conocer, apoyarnos en
nuestras seguridades!
Y solo hay un
camino ante la incertidumbre: soltar lo nuestro, confiar, caminar, dejarse
ayudar, y el Señor hará algo nuevo en cada una. Vivimos temiendo a lo
desconocido, más fuera del Monasterio, donde tenéis situaciones tan cambiantes:
trabajos, estudios, casa, espacios…
Jesús, cuando
envía a sus discípulos a predicar, los envía con las manos vacías: ni maletas,
ni mudanzas, ni títulos que avalen sus destrezas… En lo que puedan poner su
seguridad. ¿Por qué? Porque esa pobreza te hará apoyarte en Su grandeza y dejar
que Él sea fuerte en ti, y experimentarás que actúa y cambia todos tus miedos
en bendiciones.
“No llevéis
bolsa, ni alforja, ni sandalias“ (Lc 10, 4-11)… Con que pongas a Cristo como tu
seguridad y confianza es suficiente.
Hoy, el reto
del amor es que pongas tu confianza en Él. Cuando esa nueva situación te
inquiete, pon tu mirada y tu corazón en Cristo, descansa en Él y deja que guíe
tus pasos.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
07 agosto 2024
Fuente: Dominicas de Lerma
