En ocasiones, pasamos por situaciones de sufrimiento que se vuelven difíciles de afrontar. Sin embargo, es ahí donde Dios más nos muestra su consuelo y cercanía
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Seguro habrás
escuchado que el sufrimiento en la vida es inevitable; ciertamente lo es, pero
lo que si podemos cambiar es la manera de enfrentar esta etapa, de modo que nos
acerque más a Dios. Pues, en esos momentos en los que sentimos con mayor
intensidad tristeza, soledad y dolor hay una oportunidad de
santificación.
Todo
sufrimiento tiene un propósito
Por más grande
o pequeño que sea el sufrimiento, nos acerca más a Cristo. Los santos
encontraron un regocijo especial al unir su dolor y sufrimiento al de Jesús, no
porque les gustará sentir dolor, sino porque sabían que Dios se manifestaba con
mayor fuerza en esos momentos.
San Pablo,
explica en sus cartas a los Romanos cómo percibir los sufrimientos que llegan a
nuestra vida inexplicablemente:
"Yo
considero que los sufrimientos del tiempo presente no pueden compararse con la
gloria futura que se revelará en nosotros". (Rm 8,18)
Sufrimiento
con propósito
Como hemos
visto, no somos los únicos que se enfrentan al dolor del sufrimiento, por esta
razón los santos le han dado un propósito a su sufrimiento al ofrecerlo por la
conversión de las almas, por la iglesia o en reparación por los pecados que se
cometen alrededor del mundo.
De esta manera
podemos darle un propósito a nuestras penas y unirnos más a Cristo, pues Él
sabrá recompensarlo como bien lo menciona san Pablo.
A continuación,
estos cinco santos nos explicaran algunos frutos que nos deja el
sufrimiento.
1. A mayor
prueba, mayor amor - San Pío de Pietrelcina
Este santo
decía: "cuanto mayor es tu sufrimiento, mayor será el amor de Dios por
ti". De modo que Dios nunca nos abandona, aunque sea difícil percibir su
presencia el nos abraza ante el dolor.
2. Ser
santos en la tristeza - San Ignacio de Loyola
Este gran
santo, quien nos recuerda el propósito de nuestra vida con sus ejercicios
espirituales, nos recuerda la fórmula secreta para ganarnos el cielo, en medio
de la tormenta.
"¿Quieres
convertirte en un gran santo? Pídele a Dios que te envié muchos
sufrimientos".
Con ello san
Ignacio, quiere demostrarnos que, en medio de la prueba es en donde más podemos
santificar nuestra vida y sumar puntos para el cielo.
3. Consuelo
en medio de la tormenta - Santa María Magdalena de Pazzi
"Serás
consolado según la grandeza de tu dolor y aflicción; cuanto mayor sea el
sufrimiento mayor será la recompensa".
Esta virgen y
santa mujer, nos enseña el rumbo para recibir el consuelo de Cristo, pues cita
las mismas palabras que san Pablo en sus cartas, recordándonos que todo aquello
que nos aflige será curado con la gracia de Dios, siempre y cuando le
permitamos sanar nuestras heridas.
4. Cargar la
cruz con propósito - Santa Rosa de Lima
Esta increíble
santa nos hace una invitación a cargar nuestra cruz con propósito, sabiendo que
ahí está la vía para llegar al cielo:
"Fuera de
la cruz, no hay otra escalera por donde subir al cielo".
5. Amar
verdaderamente a Cristo - Santa Gema Galgani
"Si
realmente quieres amar a Jesús, primero aprende a sufrir, porque el sufrimiento
te enseña a amar".
De esta manera,
santa Gema nos hace entender que para amar verdaderamente, es necesario pasar
por el sufrimiento, mismo que nos purifica el alma y nos eleva más a la
presencia de Dios.
Nadie dijo que
es fácil afrontar este tipo de situaciones, pero ahora tenemos otra perspectiva
del sufrimiento que nos ayuda a entender el para qué y lo más importante: nos
conduce al profundo amor de Jesús.
Karen Hutch
Fuente:
Aleteia
