El Observatorio para la Libertad Religiosa y de Conciencia (OLRC) denuncia el aumento de ataques a cementerios en España que a lo largo de 2024 han registrado destrozos y robos en tres camposantos y robos en otros 21, por lo que reclama más vigilancia en víspera de Todos los Santos.
Imagen referencial de cementerios. | Crédtio: Pixabay. Dominio público |
Entre
los meses de mayo y julio, “una banda se dedicó a robar crucifijos e imágenes
en 19 camposantos de toda la provincia de Toledo”. Sus integrantes fueron
detenidos, como otras tres personas por hechos similares acaecidos en diciembre
de 2023 en el mismo territorio.
El
cementerio de Valdoviño en La Coruña, al noroeste de España, un grupo de
jóvenes rompió nichos e imágenes religiosas durante la noche de San Juan,
hechos que grabaron y publicaron en las redes sociales.
En
la localidad de Estremera, en Madrid, más de 80 crucifijos fueron robados el
pasado mes de junio y en septiembre atacaron el camposanto de San Fernando en
Sevilla durante la noche, destrozando tumbas y cruces.
Según
ha podido conocer el OLRC, a inicios de este mes de octubre, también rompieron
diversos enterramientos e imágenes religiosas “a mazazos” en el cementerio de
Canales, situado en la provincia de León.
“En
años anteriores, no habíamos registrado casi ataques a cementerios. Era un tipo
de ataque que casi no se producía, pero en 2024 hemos registrado un aumento de
los robos y destrozos de estos lugares sagrados”, explica María García,
presidenta del OLRC en un comunicado remitido a los medios.
“Estos
hechos son especialmente dolorosos para las familias”, subraya García, ya que
se encuentran las tumbas de sus seres queridos destrozadas cuando van a
visitarlos.
“Además,
los vándalos y ladrones se dirigen especialmente a las cruces y las imágenes de
la Virgen y otros santos”, detalla García.
“En la víspera de la festividad católica de Todos los Santos, pedimos
que se aumente la vigilancia, durante todo el año, en los camposantos. Es
cierto que estos días son especialmente visitados por las familias. Pero en
otros momentos estos lugares están solitarios, o incluso abiertos durante la
noche, y facilita demasiado esta clase de robos y vandalismo”, concluye la
presidenta del Observatorio para la Libertad Religiosa.
Por Nicolás de
Cárdenas
Fuente: ACI