Este lunes 22 de abril, a las 19.30 horas, quienes se encuentren en Madrid podrán asistir a un evento muy singular que se une a los cada vez más numerosos homenajes que se rinden a la Reina Isabel la Católica (1451-1504).
Los integrantes del Coro Reyna Ysabel. Dominio público |
La
celebración litúrgica tendrá el acompañamiento musical de la Misa de la
Coronación compuesta por Wolfgang Amadeus Mozart en 1779 e interpretada por el Coro Reyna Ysabel, de más de
ochenta voces, fundado al efecto, para esta y futuras ocasiones, por Luis
Antequera, escritor y colaborador de ReL.
La
iniciativa de esta misa parte del Círculo Cultural Hispanista de Madrid, en el
que participan "personas muy comprometidas con la causa isabelina como Lourdes Cabezón, Ángeles Alonso, Almudena Enríquez de Salamanca y
tantos otros", nos explica Antequera.
Una Misa de gran belleza
La Misa
de la Coronación la compuso Mozart con solo 23 años y es la
decimosexta de las diecinueve que suscitó su genio: "Fue interpretada para
la coronación imperial de Leopoldo II en la ciudad
de Praga, dirigida además por el propio Mozart tres meses antes de su
fallecimiento. Para muchos es esa es la razón de su nombre. Pero es también
posible que Mozart la compusiera para la coronación de alguna Virgen".
Esta
pieza musical ha sido escogida por "su belleza, por su aquilatada
duración, entre 25 y 30 minutos, que la hacen muy apropiada para acompañar una
ceremonia litúrgica, y por una tercera razón no menos importante: este año 2024
estaremos celebrando, en diciembre, el 550º aniversario de la coronación de la Reina Isabel como reina
de Castilla, en 1474, lo que convierte a la Misa de la
Coronación de Mozart en una pieza particularmente adecuada
para dedicársela en una circunstancia como ésa".
"Es
una misa muy melódica, muy rítmica, fácil de asimilar por toda clase de
oyentes, pegadiza diría incluso", explica el fundador del Coro Reyna
Ysabel: "Cuando uno la escucha por primera vez -por lo menos eso me pasó a
mí-, casi no diría que se trata de una misa. Y sin embargo, cuando la aprende y
la canta, se da cuenta de su profundidad,
de su perfecto acompasamiento al
texto que expresa". Consta de un Kyrie,
un Gloria, un Credo,
un Sanctus Benedictus y un Agnus
Dei, que se completarán con un Ave Verum, también
de Mozart, para la comunión.
"Los enemigos de Isabel son
poderosos"
Pero
la motivación del acto del lunes no es solo ni principalmente musical: "El
objeto de la Misa es triple: el primero de ellos pedir por el alma de la gran reina de la Historia de
España; el segundo, rememorar su figura, que tantos valores nos ofrece en esta hora precisa de
nuestra Historia; y tercero, pedir por la pronta beatificación de su persona, ejemplo de virtudes
cristianas, y sobre todo, la responsable principal de que la mitad de los
católicos del mundo al día de hoy hablen español, y lo sean por obra y gracia
de la obra de los misioneros españoles".
Antequera,
autor entre otras obras de Historia desconocida
del Descubrimiento de América,
señala entre las virtudes cristianas de Isabel "su sentido de la justicia y de la
rectitud, su humanidad y
consideración hacia los más desfavorecidos de entre sus súbditos, precisamente los indígenas americanos".
No
se le ocultan los obstáculos para el reconocimiento de su santidad: "Los enemigos de Isabel son
poderosos. Lo son, en general, los mismos que los de España, tantos de
ellos incrustados entre nosotros mismos, los españoles: es así de duro, así
tenemos que aceptarlo. Pero la canonización de Isabel es una causa justa, y la justicia, aunque a veces se haga
esperar, termina siempre por prevalecer. Sí, Isabel será declarada beata… y
luego santa. La Iglesia
católica se lo debe sobradamente, que nadie lo dude".
Carmelo López-Arias
Fuente: ReL