El secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, se reunió con el primer ministro congoleño en Kinshasa para suscribir una serie de pactos que definirán el estatuto jurídico de la Iglesia en ámbitos como la salud, las finanzas, la atención pastoral y el trabajo social
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Foto: Vatican News |
Lo cuenta el periodista italiano Salvatore Cernuzio, enviado
especial de Vatican News al país con la
delegación que acompañó al cardenal Parolin este pasado fin de semana. La firma
tuvo lugar inmediatamente después de una reunión privada del secretario de
Estado vaticano con el primer ministro, Jean-Michel Sama Lukonde.
Este acuerdo pone en marcha uno
anterior, firmado por la Santa Sede y el país africano el 20 de mayo de 2016.
El acuerdo fue rubricado en el Vaticano por Paul Gallagher, secretario para las
Relaciones con los Estados y los Organismos Internacionales, y el entonces
ministro de Asuntos Exteriores congoleño, Raymond Tshibanda N’Tungamulongo.
Constatando la independencia y autonomía tanto de la Iglesia como del Estado,
establecía el marco jurídico de las relaciones mutuas y la posición jurídica de
la Iglesia en el ámbito civil y su libertad en la actividad apostólica y en la
regulación de las materias de su competencia.
Ratificado en 2019 y con entrada en
vigor en 2020, nunca se había aplicado en su totalidad. El pasado mes de junio
un decreto del primer ministro pedía su implementación y, por tanto, el
reconocimiento de la Iglesia como entidad jurídica. Tras meses de negociaciones
con la CENCO, la nunciatura y los ministerios implicados, una comisión mixta
elaboró cinco acuerdos específicos que regulan los ámbitos de la enseñanza
religiosa en las escuelas, las instituciones educativas católicas, las
actividades caritativas y asistenciales de la Iglesia, la atención pastoral en
las instituciones penitenciarias y hospitalarias, y el régimen patrimonial y
fiscal.
«A partir de ahora todo será más fácil»
«Este paso es la manifestación del
deseo del presidente de expresar el honor de su visita», dijo el primer
ministro al cardenal Parolin. Este, por su parte, subrayó que «el acuerdo
consolida la relación de cooperación que une desde hace siglos a la Iglesia
católica y a las autoridades políticas de este país, al servicio de toda la
población».
«El interés de la Iglesia se orienta
esencialmente a la colaboración para el desarrollo humano integral de todas las
personas, sin distinciones étnicas o religiosas, y especialmente de los más
pobres y necesitados», recalcó el cardenal. Y afirmó esperar que el acuerdo no
represente solo «el final de un largo proceso sino, sobre todo, que sea la
piedra angular de una nueva colaboración más intensa y ordenada».
El arzobispo de Kinshasa, el
cardenal Fridolin Ambongo Besungu, aseguró a Vatican News que
«a partir de hoy todo será más fácil para nosotros en el ámbito de la
educación, la salud, el trabajo social… todo el trabajo que venimos haciendo
desde hace años». De hecho, la Iglesia en la República Democrática del Congo
dirige el 50 % de las escuelas, y en el campo de la salud tiene el 40 % de los
centros sanitarios».
El acuerdo da un nuevo impulso. «Si antes trabajábamos, pero nadie, empezando por un obispo en su diócesis, sabía cuáles eran los derechos y los deberes de la Iglesia hacia el Gobierno, desde ahora las cosas están más claras. Y sabemos que todo el trabajo se hace dentro de una legislación reconocida por el Estado».
Fuente: Alfa y Omega