Tiene un canal en YouTube en el que así se presenta: "Soy un joven católico bautizado en 2015 con 28 años. Quiero compartir mis experiencias de los últimos años de mi vida, reflexiones y mostraros las BONDADES DE LA IGLESIA CATÓLICA. ¡Vamos a hacerlo entre todos! ¿Te apuntas?"
Enrique Vidal Flores. Dominio público |
Youtuber católico, Enrique
Vidal Flores realiza videos en su canal de Youtube, dice que “desmontando
mitos”. Hoy, se presenta ante la cámara para dar testimonio de su conversión:
En este video testimonial
Enrique recuerda el momento cuando se sus padres le comunicaron que se iban a
separar. A partir de ahí vivió sólo con su madre y hermano. En una época de
crisis, su madre tomó una decisión que no pasó desapercibida para Enrique. “Le
ayudaba mucho ir a la Iglesia, colaborando a limpiar, en el almacén de Cáritas,
hacía lo que podía”, recuerda.
La madre quería contagiar ese entusiasmo a su hijo y le invitó a que le
acompañara en algunas actividades. “A mí me gustaba compartir esos momentos con
ella y empecé a poner Radio María en casa", confidencia. No fue menor esa
decisión pues hasta ese momento la relación Enrique con la Iglesia había sido
prácticamente nula. Y sería el germen de lo que vendría después.
Cierto día hubo un libro -'Para salvarte' del Padre Jorge Loring sj- del que
escucharon en Radio María y la madre de Enrique se lo regaló a su hijo. “De este
libro hubo dos frases que me marcaron a la hora de dar pasos en la fe. La
primera era que, si no estabas bautizado, aún podías salvarte y la segunda
frase era que si no habías rezado nunca o no sabías cómo hacerlo era tan
sencillo como ponerte a los pies de la cama de rodillas y hablar con tu mejor
amigo".
Desde entonces Enrique no ha dejado de hacerlo. Pasó ese año rezando y
perseverando en la oración. Luego se planteó que si Dios estaba haciendo tanto
por él cómo podía de alguna forma corresponderle. La primera idea que se le
vino a la cabeza fue: ¡bautizarse! Pero tres semanas antes de bautizarse
empezaron las tentaciones, que finalmente serían derrotadas con el auxilio de
la gracia de Dios.
En este proceso de
conversión, la castidad sería un tesoro que Enrique descubriría. “Ocurrió por
una relación que tuve con una chica. Estuvimos mes y medio nada más. Fue
importante porque ese dolor, esas heridas que se me generaron durante esa
relación, después me hicieron plantearme mi vocación”, comenta.
Tras esa experiencia nada ni nadie lograba conquistar su corazón. Y entonces se
planteó si tal vez Dios tendría para él otro camino en la vida. Pronto llegaría
la respuesta al descubrir la vida que abrazó como laico consagrado.
Fuente: Portaluz