¿Dónde está la llave?
Todas
tenemos el mismo maletín de plástico para guardar el material de trabajo:
alicates, abalorios... También tenemos un pequeño candado para cerrarlo; no por
seguridad, sino porque, como tiene un mal cierre, si no lo llevase, al cogerlo
del asa se abriría, cayéndose todo por el suelo, y te puedes imaginar qué lío.
Así
que siempre dejo el candado puesto con la llave metida en él.
Pero
ayer fui a cogerlo y me di cuenta de que no estaba puesta la llave: ¿se me
habría caído? ¿Dónde la podía haber perdido? Me pasé un buen rato buscando.
Finalmente,
se me ocurrió pedir a una hermana su llave para probar y... ¡funcionó! Resultó
que todos los candados usan la misma llave y, ¿sabes?, apareció en ese momento
la mía... Estaba dentro del maletín.
Cristo
es la llave que abre ese candado que has puesto a “tu maletín” y no sabes cómo
abrir. Está a tu lado, esperando a que le dejes entrar para regalarte todo su
Amor, para reconstruirte y después, caminando desde esa experiencia de Amor,
puedas, con tu llave, abrir otros corazones desde el Amor.
Hoy
el reto del amor es que busques tu llave con Cristo y abras el corazón.
VIVE
DE CRISTO
Fuente:
Dominicas de Lerma
