En la conclusión de los
Ejercicios Espirituales el Ariccia, el Santo Padre dirigió su saludo personal
al padre José Tolentino, quien llevó a cabo las meditaciones
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El saludo fraterno con el padre Tolentino, predicador |
Tras
seis días de ejercicios espirituales, iniciados el domingo pasado por la tarde,
el Santo Padre Francisco regresa al Vaticano en el viernes de la Primera Semana
de Cuaresma.
Como
es habitual, antes de partir, el saludo y agradecimiento del Pontífice al
predicador, este año el sacerdote portugués, José Tolentino Mendonça, Vice
Rector de la Universidad Católica de Lisboa:
“Padre,
querría agradecerle en nombre de todos por el acompañamiento en estos días, que
hoy se prolongarán con la Jornada de ayuno y oración por Sudán del Sur, Congo y
Siria”.
“Gracias,
padre, por habernos hablado de la Iglesia, por habernos hecho sentir la
Iglesia, este pequeño grey. Y también por habernos amonestado a no disminuirlo
con nuestras mundanidades burocráticas. Gracias por habernos recordado que la
Iglesia no es una jaula para el Espíritu Santo, sino que el Espíritu vuela
también fuera y trabaja fuera. Y con las citaciones y las cosas que usted nos
ha dicho nos hizo ver cómo trabaja en los no creyentes, en los “paganos”, en
las personas de otras confesiones religiosas: es universal, es el Espíritu de
Dios, que es para todos.
También
hoy hay unos “Cornelio”, los “centuriones”, los “guardianes de la cárcel
de Pedro” que viven en búsqueda interior o también saben distinguir cuando hay
algo que llama. Gracias por esta llamada a abrirnos sin miedos, sin rigidez, a
ser blandos en el Espíritu y no momificados en nuestras estructuras que nos
encierran. Gracias, padre. Y siga rezando por nosotros. Como decía la madre
superiora a las religiosas: ¡Somos hombres! Todos pecadores. Gracias padre. Y
que el Señor lo bendiga”.
El
Papa y los miembros de la Curia Romana regresan al Vaticano desde la localidad
romana de Ariccia, prosiguiendo, como ha sido recordado por el pontífice en su
saludo al padre Tolentino, con la Jornada de ayuno y oración por la República
Democrática del Congo, por Sudán del Sur, Siria y por las situaciones de
conflicto en el mundo, tal fuera la invitación que dirigiera a todos, invitando
a unirse a esta jornada también "a los hermanos y hermanas no católicos y
no cristianos en las modalidades que considerarán más oportunas", el
pasado domingo 4 de febrero a la hora del Ángelus.
Griselda
Mutual - Ciudad del Vaticano
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