Consecuencias de compartir
una misma mesa
Hola,
buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
En
nuestra Orden, uno de los pilares es el estudio. Uno de nuestros lemas es
“Veritas”; es decir, que somos buscadores de la verdad. Por ello, acostumbramos
a tener clases y estudio a diario.
El
otro día estábamos en clase en el Noviciado con Lety. Normalmente aprovechamos
para ir profundizando, y tomamos apuntes, subrayamos...
En
esas estábamos cuando de pronto sentí que, al levantarme para coger un lápiz,
moví la mesa entera y, como consecuencia de ello, lo que estaba subrayando
Joane también se movió. Su línea salió disparada en otra dirección...
Al
poco rato, una pierna que se movía por debajo de la mesa comenzó a hacer
temblar todo, y entonces me sucedió lo mismo a mí con el subrayado. Aquello
parecía un electrocardiograma más que una línea.
¡Ya
me partía de la risa! Pero lo sucedido me llevó a pensar en cómo, todo lo que
hacemos, en realidad tiene una fuerte repercusión sobre los que están a nuestro
alrededor.
Cuando
nos levantamos con el pie izquierdo, comenzamos sintiéndonos mal con nosotros
mismos pero, al final, todos los que ese día convivan con nosotros son
partícipes también del mal humor. Todo se transmite: la falta de paz, la
agresividad, cuando juzgamos...
Y,
a su vez, el día que amanecemos con una sonrisa, todo se ve de una manera
diferente: sonríes a los demás, contagias alegría, das vida a las
conversaciones, transmites fuerza y deseo de caminar hacia adelante...
¡Todo,
todo, todo se transmite a los que comparten mesa con nosotros!
Jesús
cada día salía al encuentro de los demás, y no dejaba a nadie indiferente. Él
curaba a los enfermos, escuchaba al que le pedía, perdonaba a todo el que
quería cambiar de corazón...
Hoy
el reto del amor es sonreír a 10 personas que te miren a los ojos. Y, si hoy te
has levantado un poco de mal humor, acude al Señor para que cambie tu forma de
afrontar el día. En Él encontrarás la fuerza, la paz y la alegría que necesitas
para ello. ¡En Su mesa hay sitio para todos!
VIVE
DE CRISTO
Fuente:
Dominicas de Lerma