AL CONFERIR UN SACRAMENTO, ¿QUÉ PUEDE HACERLO NO VÁLIDO?

La materia y la forma de un sacramento no pueden ser cambiadas porque si esto ocurriera, el riesgo de hacerlo no válido es muy alto

Gorodenkoff | Shuttesrtock

Un amable lector nos envió un comentario acerca de lo que debe decir quien administra la comunión, ya que, a su parecer, no es correcto que se diga "este es el cuerpo de Cristo" o algo semejante. Pero también expresó una duda: "¿el sacramento es válido?" Lo explicamos a continuación.

Materia y forma

El Dicasterio para la Doctrina de la Fe publicó la nota Gestis Verbisque sobre la validez de los sacramentos. En el documento, el cardenal Víctor Manuel Fernández, prefecto del dicasterio, menciona la preocupación de los obispos por "la multiplicación de situaciones en las que se veían obligados a constatar la invalidez de los Sacramentos celebrados".

Explica que, debido a "las graves modificaciones introducidas en la materia o en la forma de los Sacramentos", la celebración había sido nula, viéndose en "la necesidad de localizar a las personas implicadas para repetir el rito del Bautismo o de la Confirmación".

Recordamos que la materia es aquella parte visible con lo que se realiza el sacramento y la forma son las palabras. Si se cambia algo, el sacramento es no válido.

El mismo cardenal menciona algunos ejemplos:

...en lugar de utilizar la fórmula establecida para el Bautismo, se han utilizado fórmulas como las siguientes: «Te bautizo en nombre del Creador...» y «En nombre de papá y de mamá... nosotros te bautizamos» (Introducción de la GV).

La materia, en el caso del Bautismo, es el agua; en la Confirmación, el santo crisma, en la Eucaristía, el pan ácimo y el vino de uva, etc.

¿Es inválida la comunión si cambian las palabras?

En el caso de la duda de nuestro lector, las palabras usadas por el ministro que administra la sagrada Comunión no invalida el sacramento. Se trata del momento de la sagrada comunión, así es que la santa Hostia ya está consagrada.

En donde debe tener cuidado el ministro presidente es en la forma, es decir, en las palabras que se usan en el momento de la consagración:

TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL,
PORQUE ÉSTO ES MI CUERPO
QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Para consagrar el pan. Y para consagrar el vino:

TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR USTEDES
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

El sacerdote u obispo lee directamente del Misal para no cambiar las palabras. Eso sí haría inválido el sacramento. Por eso, el Obispo del lugar debe ser informado si esto ocurre.

Mónica Muñoz

Fuente: Aleteia