«ALQUILERES A PRECIOS RAZONABLES»: LA PETICIÓN DE MONSEÑOR MUNILLA A LOS CATÓLICOS PROPIETARIOS DE VIVIENDAS

El esfuerzo económico que debe hacer una familia para costearse el alquiler de una vivienda supone el 35 % de los ingresos familiares, llegando al 80 % para personas que simplemente buscan una habitación

Monseñor José Ignacio Munilla . Europa Press

El obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, ha sugerido a los católicos que sean propietarios de vivienda en arrendamiento que reflexionen sobre la necesidad de alquilarlos «a precios razonables» ante el aumento de exclusión residencial al que se enfrentan personas en situación de precariedad.

Durante la presentación de los datos anuales de Cáritas Diocesana, Munilla ha manifestado la necesidad de regular el alquiler teniendo en cuenta los recursos de la persona alquilada y «no solo el precio de mercado», que ya se ha convertido en algo de difícil acceso para familias.

Esta problemática del acceso a la vivienda ha sido uno de los principales puntos a tratar en la presentación de la Memoria 2024 de Cáritas Diocesana de Orihuela-Alicante, que ha contado con la presencia del director y del secretario general de la entidad, Víctor Mellado y Javier Ruvira, respectivamente, además del prelado.

Problemas de alquiler

Según estudios realizados por la entidad, el esfuerzo económico que debe hacer una familia para costearse el alquiler de una vivienda supone el 35 % de los ingresos familiares, llegando al 80 % para personas que simplemente buscan una habitación.

Para Mellado, el precio de alquiler que hace cuatro años era «asequible en Alicante en comparación con ciudades como Madrid o Barcelona», ahora ha dejado de serlo y se ha trasladado también a localidades adyacentes como Elda, Aspe o Crevillente: «el precio que se pide por habitaciones ha pasado en un año de 150-200 euros a 400-500», ha recalcado.

Además, el delegado episcopal de Cáritas, Joaquín Carlos Carlos, ha anunciado la nueva campaña de Cáritas para 2025 bajo el lema «Mientras haya personas, hay esperanza», centrada en el acompañamiento y el apoyo psicológico a las personas en situación precaria mediante varias iniciativas en materia de la salud mental.

Fuente: El Debate