IGLESIA EN EL MUNDO: DOMINGO VII DEL TIEMPO ORDINARIO, POR EL PADRE EVARISTO DE VICENTE

AMAD, PERO ¿A QUIEN ME ODIA? BENDECID ¿A QUIEN ME MALDICE? IMPOSIBLE. LO PIDE DIOS: LUEGO POSIBLE ES.

Me pide Dios que ¿ame a mis enemigos, que haga el bien a quien me odia, que bendiga a quien me maldice… y que rece por los que me calumnian? ¿¡ESTAMOS LOCOS!? El que es el Camino, la Verdad y la Vida Jesús ES LO QUE NOS PIDE. Y ¡Ah! Aunque algunos lo pensaban entonces y lo piensan ahora, Él, no, no estaba loco. A todo caso sí estaba “LOCO DE AMOR” a los que les pedía esto. Tan loco que para que LE AMARAN, dio su vida por nosotros. No estaba loco. Bueno, si: estaba loco de amor por todos nosotros. Por eso a los que le mataban, el perdonaba: “Padre perdónalos porque no sabes lo que hacen”. Encontró una excusa para perdonar.



P. EVARISTO DE VICENTE