Tropezarse… con Cristo
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Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
Hay una Hermana
a la que le encanta hacer Rosarios. Los hace de colores, con bolas grandes,
pequeñas… dedica los recreos y parte de sus tardes a hacerlos y, además, ¡le
encanta regalarlos!
Ayer, estábamos
rezando el Rosario y encontré uno de sus Rosarios en mi sitio. Al salir, metí
la mano en el bolsillo y mis dedos tropezaron con un Rosario. Pensé que me
había guardado el que acababa de utilizar y, al mirarlo, vi que era otro. En la
celda tengo otro, en la bata también he encontrado… ¡Gracias a esta Hermana,
tengo Rosarios por todas partes!
Al darme cuenta
de ello, experimenté lo importante que es llevar algo con lo que “nos
tropecemos”, algo que nos ayude a mirar al Señor, a María, que nos ponga en
sintonía con Ellos. Porque es fácil despistarse en medio del trabajo y la
actividad de cada día, y qué agradable es encontrar siempre algo que te
recuerde que no estás solo, que te ayude a poner Amor en lo que haces…
Es como si
Jesús me susurrara: “Recuerda que estoy aquí, contigo.”
A lo largo del
día, podemos encontrarnos con muchas cosas: el ruido, las preocupaciones, la
rutina… pero qué diferente es cuando encontramos algo que nos recuerda que, en
medio de todo, Él está con nosotros. Cuando permitimos que Cristo se cuele en
cada rincón, cuando llevamos signos de Su presencia con los que tropezarnos—en
el bolso, el llavero, el bolsillo…—podemos volver una y otra vez a la certeza
de Su Amor.
“Así pues, ya
comáis, ya bebáis o hagáis lo que hagáis, hacedlo todo para gloria de Dios.” 1
Cor 10,31
Hoy el reto del
amor es que llenes todos los rincones por los que pasas con algo con lo que te
tropieces y te lleve a Jesús: un Rosario, una cruz, una imagen… algo que te
ayude a mantener el corazón lleno de Su Amor y presencia. Lo que nos llena, nos
transforma.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
16 febrero 2025
Fuente: Dominicas de Lerma