Calentando motores
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
¡Feliz Año
Nuevo! Bueno, aunque… realmente hoy celebramos la solemnidad de Santa María,
Madre de Dios. Pero es que no hay mejor forma de comenzar el año que poniendo
en las manos de la Virgen María todo el año pasado y todo este próximo
año.
¡Qué bien
puesta está esta fiesta! Porque todas las cosas buenas comienzan y terminan en
María. Por Ella nos vino la Vida, y Ella está presente en todo lo nuestro,
aunque muchas veces de forma callada y escondida.
Nuestra
comunidad tiene una peculiaridad con la Virgen. En vez de rezar el Ángelus a
las 12, lo proclamamos tres veces a lo largo del día: antes de la oración de la
mañana, al mediodía y al llegar a la oración de la tarde. Además, culminamos el
día con la Salve en Completas… y de esta forma tan sencilla comenzamos y
terminamos cada día con María.
Cada mañana,
cuando ya toda la comunidad está reunida en la capilla y empieza el Ángelus, se
me escapa una mirada hacia Ella, y me surge una frase: “calentando motores”. Y
es que, al igual que los aviones necesitan unos instantes para calentar los
motores antes de despegar, mirar a María antes de comenzar nuestras cosas es
como ese acto de “calentar los motores”.
Comenzar el año
con María no es casualidad. Hoy es nuestro día de “calentar motores”. Esta
fiesta refleja el deseo de toda la Iglesia de emprender lo nuevo que está por
venir con la confianza puesta en María. No sabemos cómo será el vuelo, pero sí
contamos con que Ella mantendrá su mirada atenta sobre nosotros. Por eso, hoy
somos nosotros quienes queremos mirarla a Ella, colocar nuestra vida entre Sus
Manos y pedirle que guíe nuestro caminar y el de los nuestros.
Hoy el reto del
amor es mirar a María y emprender, lleno de esperanza, el vuelo de este Año
Jubilar 2025. Ella estuvo presente en todos los momentos clave de la vida de
Jesús; también lo estará en los nuestros.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
01 enero 2025
Fuente: Dominicas de Lerma
