HOY EL RETO DEL AMOR ES DECIR "SÍ" Y PONERSE EN MARCHA PARA REALIZAR ESE SERVICIO

Algo espectacular

Dominicas de Lerma

Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

Aquel día celebrábamos una fiesta especial y, por mi oficio de panadera, había concretado con la hermana procuradora que me encargaría de preparar un desayuno más solemne.

Esto significaba que debía ausentarme un rato de la oración de la mañana para hornearlo, de modo que estuviera listo a tiempo.

Cuando uno tiene un servicio por delante, la reacción no siempre es la misma. Depende de muchas cosas: desde las energías que se tengan ese día hasta el tipo de tarea que se trate.

El caso es que aquel día, debo reconocerlo, me costaba un poco la idea de tener que interrumpir la oración. Sin embargo, tenía claro que lo haría. Así que salí decidida a realizar mi tarea. Al cruzar el umbral de la puerta del refectorio, aún sin haber encendido la luz, el Señor me regaló algo asombroso: un amanecer espectacular, con un cielo “aborregado”, donde cada nubecilla recogía el tono anaranjado de los primeros rayos del sol.

¡Qué regalo me hizo el Señor! Fue una auténtica demostración de que la gratuidad primera viene de Él. El Señor se entrega con generosidad absoluta por cada uno de nosotros.

Me tocó el corazón, porque sentí como si Él me dijera: “¿Realizas un servicio, Israel? Yo también tenía pensado este regalo para ti”. Y es que Él se manifiesta con claridad cuando el amor se entrega con gratuidad. Si me hubiera negado a hacerlo, no habría pasado nada. Es más, nadie se habría enterado, pero yo me habría perdido este regalo.

Lo que más gracia me hizo fue que ni siquiera estaba realizando ese servicio de manera “perfecta”. Pero es que el Señor no necesita nada más que mi querer, aunque mi reacción instintiva fuera la contraria. Quizás eso fue precisamente lo que me mantuvo con los ojos abiertos para descubrirle.

Hoy el reto del amor es decir "sí" y ponerse en marcha para realizar ese servicio. Aunque sea desde la fragilidad, aunque sea con dudas, el “sí” abre la puerta al Espíritu para realizar en nosotros esa obra buena.

VIVE DE CRISTO

¡Feliz día!

22 enero 2025

Fuente: Dominicas de Lerma