Para el Sucesor de Pedro, un presbítero que no está cercano a su obispo es "rengo, le falta algo" y a continuación, el Obispo de Roma les solicitó "no olvidar" las "cuatro cercanías"
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El Santo Padre
se reunió con los seminaristas de la Provincia Eclesiástica de Toledo el jueves
7 de noviembre por la mañana: "Ojalá que, sin apartar los ojos de quien
nos guía, aprendamos a caminar juntos, en la esperanza del encuentro que ya
aquí gustamos de modo sacramental".
"Ustedes
saben que los presbíteros tienen que ser cercanos, tienen que fomentar la
cercanía", sostuvo el Papa Francisco durante su audiencia con los
seminaristas de Toledo, a quienes recibió en audiencia el jueves 7 de noviembre
por la mañana. En su discurso en español, el Santo Padre recordó la importancia
de la proximidad con Dios, "de tal manera que haya esta capacidad de
encontrar al Señor, estar cercano con Él", con los obispos y entre los
presbíteros.
Para el Sucesor
de Pedro, un presbítero que no está cercano a su obispo es "rengo, le
falta algo" y a continuación, el Obispo de Roma les solicitó "no
olvidar" las "cuatro cercanías".
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EL TEXTO INTEGRAL DEL SANTO PADRE
Francisco evocó
la inminente fiesta del "Reservado", una antigua tradición que
rememora la primera vez en la que el Santísimo Sacramento fue reservado en el
sagrario de la capilla. La celebración tiene tres momentos: la celebración de
la Eucaristía, la exposición del Santísimo durante todo el día y la procesión.
Aludiendo a las distintas etapas, Bergoglio manifestó que Jesús "nos
convoca como Iglesia para hacerse presente en el sacerdocio y en el pueblo, en
el sacramento y en la Palabra". "Ojalá que tenerlo en la tierra
absorba las vidas de ustedes y los corazones", les deseó el Pontífice.
El Papa les
insistió en la relevancia de permanecer a solas con el Señor, para oír la voz
en el silencio, en la escucha de su Palabra, en el testimonio de fe de quienes
rezan a nuestro lado.
“Sólo el
encuentro persona a persona, un encuentro enamorado, con Jesús puede iluminar,
sustentar y sostener el transcurso de nuestra jornada terrena. Ojalá que ese
encuentro sea realmente revulsivo eficaz que transforme nuestra existencia.”
Finalmente, el
Santo Padre dialogó a puertas cerradas con los seminaristas y el equipo
formativo.
Sebastián
Sansón Ferrari - Ciudad del Vaticano
Fuente: Vatican News