5 CLAVES PARA LA SANTIDAD EXTRAÍDAS DE LOS EVANGELIOS

Aunque muchos parezcan olvidarlo, nuestra meta en esta vida es llegar al cielo. No podemos hacer eso sin la gracia de Dios, pero también tenemos que hacer nuestra parte

Anelina | Shutterstock

A menudo estamos acostumbrados a vivir cada día con una rutina. Cuando algo interrumpe nuestros planes, provoca caos en nuestra estructura diaria. Da la casualidad de que los eventos impredecibles son bastante comunes y puede parecer que todos los días luchamos por alcanzar el equilibrio con nuestro trabajo, nuestros deberes familiares y otras responsabilidades. En consecuencia, muchas veces no nos tomamos el tiempo para pensar que estamos en este mundo para llegar al cielo y ser santos, todos y cada uno de nosotros.

Pero dentro de su plan de amor infinito para con nosotros, Dios siempre nos ha querido con él y para él. Por eso, nuestro Señor Jesucristo nos dijo qué hacer para ser santos:

1. ORAR AL PADRE

Una oración sencilla, confiada y humilde dará mucho fruto:

"Pero cuando ores, entra en tu aposento, cierra la puerta y ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará. Cuando estés orando, no acumules palabras vacías como lo hacen los gentiles. ; porque piensan que serán escuchados por sus muchas palabras. No seáis como ellos, porque vuestro Padre sabe lo que necesitáis antes de que se lo pidáis.

(Mateo 6:6-8)

2. HACER LA VOLUNTAD DE DIOS

No basta con creer. La suposición de que así es sólo nos deja con una actitud complaciente. No nos mueve a deshacernos de nuestro orgullo y de los defectos que nos alejan de Dios. Jesús fue claro:

“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino sólo el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos”.

(Mateo 7:21)

3. ESTAR UNIDOS CON NUESTROS HERMANOS Y HERMANAS

La unidad es un signo de amor entre los cristianos. No es fácil amar a todos, por eso Jesús oró para que aquellos a quienes envió comprendieran la importancia de su testimonio al mundo:

“No sólo pido por estos, sino también por los que creerán en mí por su palabra, que todos sean uno. Como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. La gloria que me has dado, yo se la he dado, para que sean uno, como nosotros somos uno…”

(Juan 17:20-22)

4. PERDONA SIEMPRE

Los cristianos siempre deben perdonar. El mundo insiste en que primero es el amor propio y luego los demás, pero esa no es la enseñanza de Cristo:

“Cuando estéis orando, perdonad si tenéis algo contra alguien; para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone vuestras ofensas”.

(Marcos 11:25-26)

5. AYUDA SIN ANUNCIARLO

En la era de las redes sociales prácticamente instantáneas , todo el mundo se entera rápidamente del bien que hacemos, ofreciendo aplausos y reconocimientos. Tenemos que tener cuidado porque podría ser nuestra única recompensa:

“Cuídate de practicar tu piedad ante los demás para ser visto por ellos; porque entonces no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos. Así que, cuando deis limosna, no toquéis trompeta delante de vosotros, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los demás. En verdad os digo que ya han recibido su recompensa. Pero cuando des limosna, no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha, para que tu limosna se haga en secreto; y vuestro Padre que ve en lo secreto os recompensará”.

(Mateo 6:1-4)

Mónica Muñoz

Fuente: Aleteia