Experimentos
Dominicas de Lerma |
Hola, buenos días, hoy Sión nos lleva al Señor.
Que pases un feliz día.
En el monasterio tenemos la tradición de
elaborar unas galletas de mantequilla con forma de cordero para celebrar la
Pascua. Es algo que me encanta, pero lo cierto es que la receta necesitaba
algunas mejoras.
Así pues, al empezar la Cuaresma, comencé a
investigar todo lo posible acerca de las galletas, y fui haciendo pequeñas
pruebas. ¡Fue una odisea! Las primeras galletas quedaron duras como pedruscos;
la siguiente masa era tan pegajosa que no se le podía dar forma, aquellas
sabían solo a harina… hasta que, cuando apenas quedaban unos días para Semana
Santa, ¡el experimento fue un éxito!!
Lo más curioso es que todas las recetas
llevaban exactamente los mismos ingredientes, ¡solo variaban las proporciones y
las temperaturas!
¡Y cuántas veces pensamos que la clave para que
la receta de nuestra vida funcione está en cambiarlo todo! Sin embargo, Jesús
lo renueva todo… ¡sin suprimir ningún ingrediente! “No he venido a abolir sino
a dar plenitud” (Mt 5, 17).
¿Cuál es tu receta perfecta? Hay que combinar
la harina de las tareas, pero sin que endurezca la masa; el azúcar de la
alegría y los buenos momentos; la mantequilla de la disponibilidad, que sabe
fundirse para que elementos diferentes se integren…
Como en mis experimentos reposteros, Cristo
sabe que es cuestión de usar las proporciones adecuadas, poniendo más gramos en
lo importante, y con la temperatura correcta, ¡la temperatura del amor!
Hoy el reto del amor es probar tus galletas. Al
final del día, repasa con Cristo tu jornada: ¿te ha salido una masa dura? ¿Tan
pegajosa que no se puede manejar? ¿Esponjosa y agradable? Preséntale tus
ingredientes al Señor para que los ordene, los pese, ¡y les dé la temperatura
adecuada!: Él quiere llenarlos todos con la vida de su Resurrección… ¡¡para
hacer contigo una maravillosa receta!!
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
06 abril 2024
Fuente:
Dominicas de Lerma