Un imperio por conquistar
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al
Señor. Que pases un feliz día.
El edificio de nuestro monasterio está situado
en lo más alto de la colina de Lerma. Su construcción tiene más de 400 años,
por lo que los cimientos no son como los de ahora. La verdad es que no sé nada
de arquitectura, pero sí me gusta observar. Y desde que nuestra nueva sala de
trabajo está situada en la planta más baja del edificio, me he dado cuenta de
algo curioso.
Esta sala está en un entresuelo, es decir, es
como una bodega excavada en la tierra. Pero lo curioso es que en toda la base
del monasterio, los muros de piedra llegan a alcanzar un grosor de un metro y
medio. Sin embargo, si subimos a las plantas más altas, los muros, aunque
siguen siendo gruesos, ya no lo son tanto.
Entiendo que esto tendrá algo que ver con los
cimientos, porque son los que sostienen el edificio. Y siempre me recuerdan a
aquella parábola que dice: “Todo el que viene a mí, escucha mis palabras y las
pone en práctica, os voy a decir a quién se parece: se parece a uno que edificó
una casa: cavó, ahondó y puso los cimientos sobre roca; vino una crecida,
arremetió el río contra aquella casa, y no pudo derribarla, porque estaba
sólidamente construida.” (Lc 6, 47-48)
Hace poco leí una frase que me encantó: El
imperio del hombre se conquista hacia dentro, es su mundo interior. Es ahí donde
el Señor nos pide que “cavemos y ahondemos”, que nuestra vida se construya con
buenos cimientos, sólidamente instalados en nuestra Roca, que es Cristo. Por
eso relaciona “cavar y ahondar” con ir a Él, escuchar Su Palabra, ponerla en
práctica…
Cuanto más crecemos en esta relación personal
con el Señor, más se desarrolla nuestro ser auténtico, somos más nosotros
mismos, esencialmente distintos de cualquier otra persona.
Hoy el reto del amor es vivir el día
conquistando tu imperio interior. Ahí, en lo más profundo de ti, está instalado
el Señor, porque nosotros mismos le hemos dejado entrar. Nuestra tarea
consistirá en dar con la Roca, y así plantar nuestros cimientos sobre Él. Para
ello, busquemos conocerle más, tratarle con asiduidad, buscar el sentido profundo
de las cosas…
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
20 octubre 2023
Fuente:
Dominicas de Lerma
