EL ARZOBISPO DE SANTIAGO PIDE A LOS POLÍTICOS QUE «SERVIR SIEMPRE SEA EL HORIZONTE»

En una Misa a la que ha acudido Núñez Feijoó, Francisco Prieto ha pedido a los políticos que «dediquen sus mejores esfuerzos a las exigencias del bien común»

Eucaristía en la catedral de Santiago, en la fiesta del
apóstol, el 25 de julio de 2023. Foto: EFE/Lavandeira 

El arzobispo de Santiago, Francisco Prieto, ha presidido la Misa con motivo de la solemnidad de Santiago Apóstol, patrón de España, celebrada este martes en la catedral de la ciudad compostelana. Tanto en la homilía como en la tradicional ofrenda —instaurada por Felipe IV en 1643— el prelado y el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, han hablado, tras las elecciones generales, de la importancia de priorizar «el bien común», de la invasión rusa de Ucrania y de las víctimas del accidente del Alvia, del que se ha cumplido una década. A la Misa ha acudido también el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo.

Durante la ofrenda, Rueda ha solicitado al apóstol que «ayude» a los españoles «a avanzar con prudencia, pero también sin vacilaciones» en el camino de la «historia» y que bajo la tutela de la corona, «con independencia de los credos», España sea «una nación abierta y acogedora».

Al inicio de la Eucaristía, el nuncio de Su Santidad en España, Bernardito Auza, ha impuesto a Prieto el palio arzobispal, que recogió el titular de la diócesis el pasado 29 de junio de manos del Papa Francisco. En su homilía, dos días después de la celebración de las elecciones generales, Prieto ha pedido por los políticos elegidos en los recientes comicios generales, para «que dediquen sus mejores esfuerzos a las exigencias del bien común y al empeño por construir una sociedad en paz, cimentada en la verdad, la justicia y la libertad, donde servir sea siempre el horizonte de la responsabilidad política, por encima de las legítimas diferencias políticas».

Además, el arzobispo ha afirmado ante una sede llena de fieles que la aportación de los creyentes y de la Iglesia en su conjunto a la sociedad tiene que ser profética, nunca acomodaticia, y tiene que responder a las necesidades y a las inquietudes del presente, vividos a menudo de forma dramática por la sociedad: «Hay una manera profética de estar en el mundo, opuesta por un lado al espiritualismo, y por otro al peligro de erigirnos en árbitros o jueces del mundo. Una dimensión profética realizada con verdad, con lenguaje atractivo y mirada amable, hasta con un sano sentido del humor y una inteligencia suficiente que sepa distinguir lo importante de lo secundario».

El arzobispo de Santiago ha asegurado que es «necesario ser testigos al servicio de una vida más humanizada, entendida como don de Dios y como tarea humana, promotores de una cultura de la vida digna de todo hombre». Y también ha encomendado a los jóvenes que peregrinarán a la JMJ de Lisboa, para que sean «testimonio de Cristo». En ella participará el propio Prieto junto a otros 70 obispos españoles, que además serán los encargados de dinamizar las 25 catequesis de habla hispana por día.

Álvaro Real Arévalo

Fuente: Alfa y Omega