El presidente de la Conferencia Episcopal Española alerta que muchos jóvenes "viven desmotivados", por lo que pide a la sociedad reaccionar para revertir esta dramática situación
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Ecclesia |
El presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal Juan José
Omella, ha mostrado su preocupación por la
desmotivación que se percibe entre los jóvenes. Un estado de apatía que puede
tener múltiples causas. Si hacemos referencia al desempleo juvenil, en
nuestro país la tasa alcanza el 36%, la más
elevada de Europa, y buena parte de los que consiguen un empleo este se
caracteriza por la precariedad y los bajos salarios.
Pero no todo se explica desde
el trabajo. La
sensación de vivir en un mundo incierto, caótico y repleto de incertidumbres
provoca que miles de jóvenes hagan un pronóstico pesimista de su futuro. La
pandemia tampoco ha ayudado a generar estabilidad emocional. Tampoco lo hace,
en parte, las redes sociales o convivir en la sociedad que valora por encima de
la persona la fama, el dinero o la belleza.
“Es necesario que devolvamos el
deseo de vivir especialmente a los jóvenes. Muchos viven desmotivados. Algunos
de forma dramática. En Cataluña, uno de cada tres adolescentes ha tenido pensamientos
suicidas, y uno de cada cuatro se ha autolesionado. Todos
debemos reaccionar”, ha alertado el también arzobispo de Barcelona en su tuit.
Entre los jóvenes de 15 a 29 años, las estadísticas sobre el
suicidio preocupan especialmente porque se ha convertido, por primera vez, en
la principal causa de muerte no natural. Se lleva por delante a más chavales que los
accidentes de tráfico, que las drogas o la violencia. Nunca antes había sucedido, al menos desde que
se tienen datos. Esto supone un auténtico problema que ha aumentado todavía más
después del confinamiento. Al terminar la cuarentena los intentos de suicidio
entre los más jóvenes se dispararon un 250%.
Fuente: Ecclesia