¿Resistente?
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Dominicas de Lerma |
Hola, buenos días, hoy Joane nos lleva al
Señor. Que pases un feliz día.
Teníamos pendiente montar unas estanterías. No
las habíamos abierto aún, confiando en que estaban bien; sin embargo, todas las
baldas estaban arqueadas y abolladas, los listones deformados y no había manera
de encajarlos y hacerlos coincidir.
Tuvimos que dedicarnos primero a enderezarlas
para hacer que encajasen las pestañas que las unían. Gracias a que eran muy
endebles pudimos hacerlo fácilmente con un mazo de goma. Pero… se supone que
cada balda aguanta 80 kg.
Y si así de blando ha sido el material, el
construirlas… ¿realmente aguantarán?
Sin embargo, cuando acabamos de montarlas,
empezamos a poner cajas encima, resultó ser fuerte y robusta, aguantaba
perfectamente.
Cada pieza por separado era maleable, débil, y
con una sola caja se deformaría, como ocurrió cuando nos las trajeron y, sin
embargo, todas unidas, cumpliendo cada una su función, formaron una estructura
resistente.
¡Cuánto me ayudó esto! Fui a la oración y el
Señor me mostraba cómo Él quiere eso para nosotros. Todos, por nosotros mismos,
somos piezas endebles, maleables y débiles. Con facilidad nos abollamos o
deformamos.
¿A dónde podrá llegar nuestra débil pieza?
Sola, a ningún sitio. La información o todo lo que nos rodea nos puede
deformar; las dificultades nos abollan… Pero Cristo nos ha cogido en Sus manos
y nos ha mostrado que Él es “el Camino, la Verdad y la Vida”, que para que tu
pieza esté firme tienes que mantener la mirada en Él y, para ser fuerte, te
regala hermanos, te regala esa Comunidad formada por otras piezas débiles, pero
que, juntos, con la mirada en Cristo, formáis una “firme estantería”.
La Comunidad, la Iglesia, es un don del Señor
para los pobres, para los que sentimos la debilidad que nos abolla. En ella,
unos nos sostenemos a otros con la oración y caminamos desde la debilidad, pero
con la fuerza del Amor. Comunidad que se hace resistente en Cristo, sabiendo
que de Él viene la fuerza y que la oración sostiene a los hermanos.
“Orad los unos por los otros para que seáis
curados. La oración ferviente del justo tiene mucho poder” (Santiago, 5).
Hoy el reto del Amor es que busques a la
comunidad. Que no camines solo o afrontes solo esa dificultad. Pide a alguien
que ore por ti en lo que estás viviendo, que te acompañe con la oración al
quirófano, a esa conversación, a un examen… Siente que la oración de los
hermanos te acompaña y te sostiene.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
24 enero 2023
Fuente:
Dominicas de Lerma