Vértigo en los andamios
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos días,
hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
En el Monasterio
hay una sala de la época del Duque de Lerma, situada justo detrás del retablo
mayor de la Iglesia. Es el relicario, donde el duque donó 107 reliquias
autentificadas de los mártires de los primeros siglos.
Esta habitación
estaba en muy mal estado y nos la están restaurando. Han empezado la
restauración por el techo. Desde abajo se veían unas grandes grietas y zonas en
muy mal estado. Me preguntaba cómo lo harían. Lo primero fue colocar una
estructura de andamios alrededor de la sala y han puesto una plataforma, de tal
manera que el suelo lo han elevado.
El otro día, cuando
lo miraba, me daba cuenta que esto es lo mismo que hizo Jesús: bajó hasta
nuestra humanidad para, después, elevarnos a hijos de Dios. Porque por nosotros
mismos nunca hubiéramos llegado a Dios. Ha sido Él, quien nos ha mostrado un
Padre que es amor, la Sabiduría divina y los tesoros del Reino de los Cielos.
Esto solo ha sido
posible porque se hizo uno de nosotros, vivió como unos de nosotros, entregó Su
vida en la cruz por nosotros y derrotó la muerte con Su Resurrección. Todo ello
para que dejemos de ser esclavos y seamos hijos de Dios.
Cuando das la mano
a Jesús y le dejas entrar en tu vida, a veces sentirás vértigo o temblarás,
pero lo importante es no soltarte y no detenerte. Él nunca te soltará y te
llevará a una meta feliz.
Hoy el reto del
amor es entrar en una Iglesia y darle gracias a Jesús. Ora un ratito, si estás
viviendo una situación de vértigo, entrégasela y pídele que muera y resucite
por ella. El vértigo desaparece cuando llegas arriba. Con la fe el vértigo
desaparece cuando confías en Jesús.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
14 noviembre 2022
Fuente: Dominicas de Lerma
