Este sábado se celebra la ceremonia de beatificación de 12 religiosos redentoristas asesinados por odio a la fe en España. Algunos de ellos, detenidos al grito de “¡fascistas!”, respondieron: “No somos fascistas, somos religiosos redentoristas”.
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Cartel oficial de la beatificación de 12 mártires redentoristas en Madrid. Crédito: Congregación del Santísimo Redentor |
Durante
el primer tercio del siglo XX, la Iglesia en España sufrió una persecución
religiosa sólo comparable a la sufrida por las primeras comunidades cristianas
en Roma, a manos de socialistas, comunistas y anarquistas.
El vicepostulador de la causa de beatificación, el P. Antonio
Manuel Quesada CSsR, ha definido a estos mártires como “12 personas frágiles
que se identificaron con Jesús Salvador de tal manera que éste les dio el
premio de identificarse incluso con su misma muerte”.
Así, “llenos de Espíritu Santo perseveraron en su vocación
misionera hasta hacer entrega de su propia vida mirando de frente y no
dejándose llevar del miedo a la muerte”, añade el P. Quesada.
Los religiosos redentoristas, además de prometer pobreza, castidad
y obediencia, tienen un voto de perseverancia. Los 12 nuevos beatos lo
vivieron “siendo fieles a su fe y vocación, anunciando la salvación y la
misericordia de Dios en medio de la guerra y la persecución”, añade el
presbítero.
Y lo hicieron “derramando su sangre como expresión de entrega
generosa, amor a Dios y perdón y reconciliación para todos”.
El P. Quesada considera que, a la gracia de “morir como misioneros
redentoristas siendo buena noticia de salvación”, de forma coherente con su voto
de perseverancia, Dios les concedió también “morir como Jesús, dando la vida en
testimonio de amor, perdonando y siendo testigo de la reconciliación”.
No en vano, algunos de ellos abrazaron y bendijeron a sus asesinos
y ofrecieron su vida por el reencuentro de los españoles, rotos por la guerra:
“Ofrezco mi vida por mis hermanos de España, por toda la congregación y por la
desdicha de España”, exclamó antes de morir el P. Vicente Renuncio.
La ceremonia que tendrá lugar en la Catedral de Santa María la Real
de la Almudena, estará presidida por el Cardenal Marcello Semenaro, prefecto
del Dicasterio para las Causas de los Santos, acompañado por el Arzobispo de
Madrid, cardenal Carlos Osoro; el superior general de los redentoristas, P.
Rogerio Gomes, CSsR; y el superior de madrid, P. Francisco Javier Caballero
CSsR.