Dos religiosas fueron detenidas el 10 de octubre durante varias horas en India, tras ser arrastradas a la comisaría por una multitud de extremistas hindúes, que las acusaron de forzar conversiones al catolicismo por vestir su hábito religioso.
Imagen referencial. Crédito: Ricardo Gómez Ángel / Unsplash |
Según
relató, el grupo de extremistas hindúes se acercó hacia un grupo de cristianos
que se encontraban reunidos para participar en las celebraciones dominicales,
atacaron a 50 de ellos y los forzaron a ir a la policía, tras acusarlos de
forzar conversiones.
Si
bien las religiosas no estaban con ellos, igual “fueron arrastradas hasta la
comisaría policial. No las liberaron sino hasta las 6:00 p.m. (hora local),
tras la presión ejercida desde la capital de Uttar Pradesh”.
Lamentablemente,
el pastor Abraham Shakil y su esposa Pratibha y la pareja en cuya casa se
celebraba el encuentro de oración, permanecieron detenidos. Los extremistas
hindúes presentaron una denuncia contra ellos, acusándolos de “insultar a las
deidades hindúes, al primer ministro y al jefe del gobierno de Uttar Pradesh”.
“El
hecho de que las monjas también hayan sido atacadas revela una nueva y
desagradable evolución en la actual ola de persecución anticristiana”, dijo
Sajan K George, presidente del Global Council of Indian Christians (GCIC).
“En
el clima político actual de la India, el hecho de llevar un hábito de monja
significa ser reconocido como ‘objetivo’ o ‘agente de conversiones’ por los
vigilantes de la derecha”, explicó.
La
organización International Christian Concern señaló que al menos 30 cristianos
fueron detenidos, desde que el estado de Uttar Pradesh aprobó a fines de
febrero la controvertida ley de conversión, que castiga con la cárcel las
conversiones forzadas. La nueva ley no aplica para los que regresen a practicar
el hinduismo.
Ese
mismo mes, la organización denunció que al menos 30 cristianos habían sido
detenidos tras ser acusados bajo la nueva ley.
Uno
de los casos ocurrió el 18 de julio, cuando nueve cristianos que estaban en una
reunión de oración en la ciudad de Gangapur, Uttar Pradesh, fueron atacados y
detenidos por la comisaría por extremistas hindúes. La organización precisó que
los agentes de seguridad estatal también arremetieron contra los cristianos
detenidos.
Tampoco
es la primera vez que se atacan a religiosas o sacerdotes católicos en el país.
En
marzo de este año, en el mismo estado de Uttar Pradesh, extremistas hindúes
forzaron a dos religiosas a bajarse de un tren. Recientemente, un sacerdote fue
juzgado y felizmente liberado, tras ser acusado de forzar conversiones al
catolicismo por cantar villancicos.
Según
Asia News, la nueva ley local contra las conversiones es una herramienta para
cometer abusos políticos, que buscan avivar los sentimientos de odio contra la
pequeña comunidad cristiana de cara a las próximas elecciones que se realizarán
en 2022.
La
persecución a las minorías religiosas en India, entre ellas los cristianos, ha
aumentado desde que el partido nacionalista hindú Bharatiya Janata obtuvo el
poder en 2014, con miles de incidentes cada año, dijo la organización cristiana
Open Doors. Además, acusó al partido gobernante de permitir que los extremistas
ataquen a los cristianos con impunidad.
El
20 de abril, la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN)
presentó su informe anual de Libertad Religiosa donde revela que la persecución
religiosa por parte de gobiernos autoritarios se ha intensificado a través de
una apología en favor de una supremacía étnica y religiosa.
Esta
práctica suele llevarse a cabo en países asiáticos de mayoría hinduista y
budista que presionan a las minorías y reducen a sus miembros a ciudadanos de
segunda clase. El caso más claro se da en la India, y también se aplican
políticas similares en Nepal, Sri Lanka y Myanmar.
POR CYNTHIA PÉREZ
Fuente: ACI