El
Pontífice critica la forma en que la sociedad actual trata a los pobres y dijo
que para «restaurar su humanidad», la gente necesita ver a los pobres como
«personas» en lugar de «parte del paisaje”
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© Antoine Mekary / ALETEIA |
En una entrevista, transmitida en el programa
Today de BBC Radio 4,
este 22 de junio, el papa Francisco habló sobre el COVID-19 como un momento
histórico y de inflexión para la humanidad.
«Ver a
los pobres significa restaurar su humanidad. No son cosas, no son basura. Son
personas. No podemos conformarnos con una política de bienestar como la que
tenemos para rescatar animales y a menudo tratamos a los pobres como animales
rescatados. No podemos conformarnos con una política de bienestar parcial”.
En la
grabación de seis minutos, tomada de una entrevista más larga en español con el
biógrafo del pontífice, el británico, Austen Ivereigh, y leída por Joseph Balderrama,
Francisco criticó la «hipocresía de ciertas personalidades políticas» y habló
sobre la necesidad de abordar el cambio climático y ayudar a los pobres.
Pobres también tuvieron una madre que los crió con amor
Francisco invitó a dar un paso decisivo
hacia una “dimensión contemplativa”, debido a que “los pobres están ocultos,
porque la pobreza es vergonzosa”.
Recientemente
en Roma, contó el Papa, en medio de la cuarentena, un policía le dijo a un
hombre: «No puedes estar en la calle, vete a casa». La respuesta fue: «No tengo
casa. Vivo en la calle”.
El Papa
lamentó que existe un gran número de personas que están en los márgenes. “Se
han convertido en parte del paisaje; son cosas”.
El Pontífice recordó a la Nobel de la Paz y santa católica, Madre Teresa, que
pedía «Ver»
a los pobres y esto “significa restaurar su humanidad. No son cosas, no son
basura; son personas”.
“No podemos conformarnos con una política de
bienestar como la que tenemos para los animales rescatados que es como se trata
a menudo a los pobres.
Tenemos que decirnos esto a menudo: el
pobre tenía una madre que lo crió con amor”, dijo citando luego la novela de
Dostoievski, «Apuntes
del subsuelo”.
“Los
empleados del hospital de la prisión se habían acostumbrado tanto que trataban
a sus pobres prisioneros como cosas. Y viendo la forma en que trataban a uno
que acababa de morir, el de la cama de al lado les dice: «¡Basta!
¡Él también tenía una madre!”.
Tenemos que
decirnos esto a menudo: esa pobre persona tenía una madre que lo crió con amor.
Más tarde en la vida no sabemos qué pasó. Pero ayuda pensar en el amor que una
vez recibió a través de la esperanza de su madre”, afirmó el Pontífice.
“No les damos
el derecho de soñar con sus madres. No saben lo que es el afecto; muchos viven
de la droga. Y verlos puede ayudarnos a descubrir la piedad, que apunta hacia
Dios y hacia el prójimo”.
Repensar un mundo pos pandemia
La voz en inglés intenta emular la
inflexión del Papa para acercar más su mensaje a los oyentes. En efecto, más
allá de ser confesional, en el programa “Rethink” la intensión es transmitir la
voz de un abuelo sabio que ayuda con su reflexión a repensar el futuro de la
humanidad ante la pandemia más fuerte en este siglo.
Fuera de una
lógica divisionista o de la lucha de antaño de clases, la posición del Papa es
la de un pastor, pues la pandemia «nos está afectando a todos: a los ricos y a
los pobres por igual y está poniendo de relieve la hipocresía”.
«Me preocupa
la hipocresía de ciertas personalidades políticas que hablan de enfrentar la
crisis del problema del hambre en el mundo pero que, mientras tanto, fabrican
armas”, añadió.
Francisco
dijo que la pandemia presentaba una «oportunidad» para desafiar el consumismo
desenfrenado y combatir el cambio climático: «Hoy creo que tenemos que reducir
nuestra tasa de producción y consumo y aprender a comprender y contemplar
nuestro mundo natural”.
«Veo signos
tempranos de una economía que es más humana. Pero no perdamos nuestra memoria
una vez que todo esto haya pasado. Este es el momento de dar el paso decisivo
para pasar de usar y usar mal la naturaleza a contemplarla”.
Welby: ‘Hay mucho que aprender del Papa’
La BBC también invitó al arzobispo de
Canterbury, Justin Welby, a dar su opinión sobre la
pos pandemia en programa Radio 4 al final de esta semana y, posiblemente
comentará las palabras del Papa.
Ambos líderes
creen en el diálogo y la colaboración en la caridad de anglicanos y católicos.
En el libro “Diversi e uniti”
(Diversos y unidos) publicado por la Libreria Vaticana
recientemente, el arzobispo Welby escribió en el prólogo de la obra dedicada a
los pensamientos del Papa: “Estoy muy contento de la amistad con el
Papa y del compromiso que compartimos en el misterio de la reconciliación. Hay
mucho por aprender de sus palabras”.
La cercanía del Papa a través de sus entrevistas
En ese libro, el Papa también escribió un
texto inédito en el que invita a todos los hombres a mirar con amor a los demás
y no temer a la diversidad. “Sin el
reconocimiento de la alteridad, no sólo el otro muere sino también yo mismo”.
El Pontífice
ya había dado una entrevista a Austen Ivereigh, autor de la biografía de
referencia, «El Gran Reformador» (Ediciones B, Madrid, 2015), y del libro sobre
el pontificado, «Wounded Sepherd («Pastor herido» (Holt, Nueva York, 2019).
En tiempo de
crisis, el Papa afirmó en esa entrevista publicada por ABC (España)
el 8 de abril de 2020 y la Civiltà Cattolica: “Resérvense para mejores tiempos
porque entonces recordar esta crisis nos ayudará”.
Además, había
sido entrevistado por la Stampa de Turín el 20 de marzo de 2020. El Pontífice
habló de su dolor en estos días de crisis por el virus y de la necesidad de
reconstruir desde tres pilares: “raíces, memoria,
hermandad y esperanza”.
Durante el
confinamiento obligatorio en el Vaticano por las restricciones en Italia, Francisco
concedió asimismo una video-entrevista vía web al periodista español, Jordi
Évole, el pasado 22 de marzo de 2020, en la que acepta que ha tenido “momentos de
crisis de fe” y las ha resuelto por la “gracia de Dios”. Esto para
evocar que las crisis pueden traer oportunidades de cambio y crecimiento
personal, comunitario y espiritual.
Ary Waldir
Ramos Díaz
Fuente: Aleteia