De los 815 laicos que están en la
misión, 184 son familias, según las Obras Misionales Pontificias de España
La presencia
de los laicos en los territorios de misión va en aumento. Entre 2012 y 2015, la
proporción de jóvenes, familias y matrimonios jubilados que han optado por ser
misioneros ha aumentado un 3,30% en España.
Según datos facilitados a ABC por
las Obras Misionales Pontificias (OMP) de España, a enero de 2017, de
los 13.000 misioneros que tiene nuestro país distribuidos en distintos puntos
del planeta, 815 son laicos y de ellos, 184 son matrimonios.
«Se
trata de personas que deciden entregar su tiempo para la misión de una forma
estable, con una estancia de al menos un año», explica la dirección nacional de
las OMP, que señala que el Camino Neocatecumenal es la institución que «más misioneros
laicos envía». El número de jóvenes y familias que parten a la misión
«puede ser mayor» -aclara esta obra de la Iglesia-, ya que muchos de ellos «no
dan sus datos».
Para
atender esta nueva realidad que se está dando en la vida misionera de la
Iglesia, la OMP de España participa estos días en el Vaticano en un inédito
seminario sobre Laicado y Misión, organizado por la Pontificia Unión
Misional -una de las OMP, centrada en la formación misionera-.
«La
misión ad gentes no es algo exclusivo de los sacerdotes y consagrados, sino que
cada vez más laicos están siendo llamados a evangelizar por todo el mundo»,
explica el director de las OMP de España, el padre Anastasio Gil García, uno de
los seis directores nacionales de las OMP que asiste al encuentro. El objetivo
es «ofrecer sugerencias y propuestas concretas a las diócesis para orientar y
acompañar a los laicos que se sientan llamados a la misión, una realidad cada
vez más común».
El
Papa Francisco en su carta al cardenal Marc Ouellet explica que «los laicos son
protagonistas de la Iglesia y del mundo, a los que nosotros estamos llamados a
servir, y no de los cuales tenemos que servirnos». «Mirar al Pueblo de Dios es
reconocer que todos ingresamos a la Iglesia como laicos», afirma el Santo Padre
a la par que defiende el pleno derecho de los laicos a trabajar a favor de la
Iglesia, y no como agentes de segunda línea.
Laura
Daniele
Fuente: ABC