Los líderes religiosos aportaron sus visiones específicas en la mesa moderada por el arzobispo-presidente de la Academia Pontificia de las Ciencias monseñor Marcelo Sanchez Sorondo
Científicos
y líderes religiosos de 15 países y 8 confesiones religiosas firmaron la
Declaración de Torreciudad para fomentar la colaboración de la Ciencia y las
principales religiones en la conservación del Medio Ambiente, como colofón del
Seminario Internacional de Ciencia y Religiones por el Medio Ambiente (ISSREC),
celebrado en el Santuario de Torreciudad (Huesca), los pasados días 20 y 21 de
junio.
La Declaración enfatiza la importancia
del diálogo entre la ciencia y la religión para conseguir decisiones efectivas
en la solución de los problemas ambientales.
En este sentido, se pone de manifiesto que «las
religiones y tradiciones espirituales son la fuente más antigua de valores
morales y de inspiración para el comportamiento» y que «las comunidades
religiosas y espirituales tienen un papel destacado en la educación de los
jóvenes en todo el mundo». Por eso, «se requiere una cooperación más estrecha
entre los científicos y los líderes religiosos en la promoción de la conciencia
ambiental y de las acciones concretas».
El Seminario, dirigido por Emilio
Chuvieco y organizado por la Cátedra de Ética Ambiental Fundación Tatiana Pérez
de Guzmán el Bueno-Universidad de Alcalá y la Fundación Promoción Social de la
Cultura, giró en torno a las enseñanzas de la encíclica Laudato Si del Papa, al
cumplirse un año de su publicación.
Francisco envió un mensaje a los
participantes deseando que el Seminario «sirva para favorecer el diálogo
científico e interreligioso sobre el cuidado de la casa común y fomentar
esfuerzos conjuntos para promover una conciencia más solidaria por el bien de
todos y cada uno de los hombres».
Al clausurar el Seminario, todos los
participantes plantaron un olivo en el Santuario de Torreciudad, como un
símbolo natural del compromiso de las diversas tradiciones religiosas y de la
comunidad científica en la conservación del medio ambiente.
El seminario comenzó con un análisis
científico de la situación ambiental. Thomas Stocker, coordinador del grupo
sobre Bases Físicas del cambio climático del último informe del Panel
Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU, explicó las bases
científicas del cambio climático. Anny Cazenave, directora de Ciencias de la
Tierra en el Instituto Internacional de Ciencia Espacial (Berna, Suiza),
describió los problemas ambientales de las aguas interiores y océanos. Peter H.
Raven, científico experto en botánica de la Universidad de Washington en St.
Louis, alertó con cifras sobre la pérdida de biodiversidad y Josef Settele,
profesor de Ecología en la Universidad Martín Lutero de Halle-Wittenberg,
explicó los problemas de la interrelación de la agricultura y los ecosistemas.
Los expertos en ética ambiental
protagonizaron las ponencias de la mesa la
creación en crisis: dimensiones de la crisis ecológica. Celia
Deane-Drummond, de la Universidad de Notre Dame, habló de la estrecha relación
entre la justicia ecológica y la justicia ambiental. Sigurd Bergman, profesor
del Departamento de Filosofía y Estudios Religiosos en la Universidad Noruega
de Ciencia y Tecnología de Trondheim, disertó sobre la pobreza y la sociedad
del postcrecimiento. Josep Mallarach, de la Comisión Mundial de Áreas
Protegidas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza,
abordó la cuestión de la conservación de los espacios sagrados. Hillary Marlow,
directora del Instituto Faraday para la Ciencia y la Religión, y profesora
Asociada de la Facultad de Teología de la Universidad de Cambridge, puso de
manifiesto los valores éticos y bíblicos para la conservación de la naturaleza
en la tradición cristiana. El profesor Wal Farouk, egipcio, presidente del
Centro Cultural Tawasul para el Diálogo Inter-civilizaciones expuso sobre los
valores ambientales en las sociedades islámicas. Naditha Krishna, profesora de
la Universidad de Madrás (India) por su parte, explicó los valores éticos y
culturales de la tradición hindú, para el cuidado de la naturaleza.
Los líderes religiosos aportaron sus
visiones específicas en la mesa moderada por el arzobispo-presidente de la
Academia Pontificia de las Ciencias monseñor Marcelo Sanchez Sorondo, y
dedicada ala
espiritualidad ecológica, líneas de aproximación y acción para una ecología
integral. El rabino de Jerusalén Yonatan Neril, fundador del Centro
Interreligioso para el Desarrollo; la monja budista Tsunma Karma Chimey Lhatso;
el procurador general de los Cistercienses, P. Lluc Torcal; el archidiácono
ortodoxo búlgaro, Petar Gramatikov Plovdiv y la monja hinduista Swamini
Umananda, pudieron destacar las aportaciones de cada una de sus tradiciones
religiosas a la conservación de la naturaleza.
Todo aquel que desee adherirse a la
declaración puede hacerlo pinchando AQUÍ
Fuente: Alfa y Omega