“Cuando
las circunstancias históricas nos piden un testimonio fuerte, allí aparecen los
mártires, los testigos más grandes. Y así la Iglesia viene regada con la sangre
de los mártires”, Papa Francisco
Los
cristianos ‘enemigos del imperio Romano’ padecieron en la Cárcel Tullianum o Mamertina,conocida como la prisión de San Pedro, ubicada en el foro romano en la Antigua Roma.
La Cárcel del
martirio cristiano ha sido inaugurada a la presencia de la prensa este
miércoles y abrirá sus puertas al público el 21 de julio de 2016.
La historia milenaria que se respira
en Roma es un signo vivo que recuerda a los cristianos que están
llamados a dar un testimonio fuerte. Así, aparecen en el horizonte los
mártires, su sangre como memoria constante para no olvidar y ayudar hoy a
los cristianos perseguidos en todo el mundo.
De hecho, San Pedro, estuvo encarcelado antes de su
martirio; la tradición y pruebas arqueológicas legitiman también que los santos Martiniano y Proceso,
sus guardias, fueron convertidos y bautizados por al apóstol Pedro en esta
prisión, antes de ser martirizados.
Es una oportunidad única paralos
fieles y los peregrinos que
visitarán Roma para el Jubileo
de la Misericordia, pues tendrán la ocasión de ver el
monumento tras las excavaciones arqueológicas y la regeneración del lugar
donde fue encadenado el Apóstol Pedro, y con raíces tan antiguas en la
fundación de la ciudad eterna por parte de Romolo y Remo.
“Era un lugar de olvido y abandono donde
los enemigos del Estado venían casi sepultados en las entrañas de la tierra,
para hacerlos adsorber por el infierno”, cuenta en la presentación monseñor Libero Andreatta,
administrador delegado ad interim de la Obra Romana Peregrinajes del Vicariato.
El lugar ha sido centro de devoción cristiana desde los tiempos medievales, y
actualmente está ocupado por dos iglesias superpuestas: San Giuseppe dei Falegnami(arriba)
construida en el XI siglo d.C. y San
Pietro in Carcere (abajo).
La cruz del altar de la capilla inferior está al revés.
Dado que Pedro se hizo crucificar boca abajo por
no considerarse digno del mismo trato que tuvo su maestro, Jesús de Nazaret,
muerto en la Cruz.
Recuperar este lugar inspirador para los
cristianos, signo de la edad Republicana de Roma, fue un trabajo común durado
un año y realizado por la Obra
Romana de Peregrinajes(ORP), el ente de la iglesia
romana que impulsa la enseñanza del Concilio Vaticano II de que el peregrinaje es un instrumento de fe, de
catequesis y de evangelización.
Prisionero
excelentes: San Pedro y San Pablo
La tradición considera que también San Pablo estuviera recluido en la Carcer Tullianum. La Cárcel
en los siglos pierde su función represiva y las pruebas datadas en el siglo VII
d.C demuestran que fue usada para el
culto cristiano. La tradición la vincula con el martirio de Pedro y Pablo.
La Iglesia de San Pedro in Carcere es una prueba, ubicada al nivel
superior del Carcer.
Asimismo, los visitantes podrán disfrutar
de una innovadora exposición museística y multimedia, realizada en colaboración
con la ORP, el Estado italiano y los entes de supervisión de la Obras como el
Coliseo y el área arqueológica romana.
La Cárcel
Mamertina, se hallaba en la ladera noreste del monte
Capitolino, frente a la Curia y los foros imperiales de Nerva, Vespasiano y
Augusto. Entre ella y el Tabularium (archivo) había un tramo de escaleras que
llevaba al Arx del Capitolio, conocido como las Scalae Gemoniae.
Fuente: Aleteia