Planes de vacaciones
Hola, buenos días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que
pases un feliz día.
Todos los monasterios están aglutinados en
Federaciones, y en ocasiones se organizan cursos específicos de formación: para
las enfermeras, para las ecónomas, para las solemnes... y, en breve, también
para las novicias.
En concreto, del 17 al 31 de mayo, Sión, Israel, Celia
y yo, junto con otras novicias, estaremos en Caleruega (cuna de santo Domingo)
recibiendo clases de distintas asignaturas.
Lety, como Madre Maestra, se quedará sola en el
Noviciado, y no para de repetirnos:
-¡Qué ganas tengo de que lleguen esos días para
"descansar", sin tener que organizar a nadie y recuperar fuerzas...!
Pero ayer estábamos todas hablando y recopilamos los
propósitos que le iban saliendo a lo largo de lo que llevamos de mes y que
anulan totalmente el de "descansar". Cada una, divertida, iba
diciendo una frase que había oído decir a Lety en distintos momentos.
-(al teléfono) Buenas tardes, no puedo atenderte hoy
pero llámame en cualquier momento del 17 al 31.
-Ufff, esta carpeta cómo está... la ordenaré del 17 al
31.
-Del 17 al 31 voy a dejar la huerta como nueva.
-Del 17 al 31 voy a pedir cita con el dentista.
-Sión, no te preocupes, que me encargo yo del perro
del 17 al 31.
-Hay demasiados correos y no paran de entrar, tendré
que seguir organizándolo del 17 al 31, no os preocupéis.
-Igual aprovecho del 17 al 31 para pintar algo...
Terminó la conversación y fuimos conscientes de dónde
pueden acabar sus "vacaciones". En esto apareció Lety, y le repetimos
cada una de las frases "del 17 al 31" y todas nos unimos en una
carcajada. Nos dimos cuenta de que compensaba vivir el momento y que el Señor
cada día pone delante lo que quiere que vivamos y cómo quiere que lo hagamos.
Dicen que se espera toda la semana para el viernes,
todo el año para las vacaciones y toda la vida para ser feliz.
Seguro que hoy el fin de semana para ti también es
esperado, a estas alturas de curso las vacaciones parece que se ven en el
horizonte, y el futuro parece que traerá algo mejor en todo lo que te rodea.
Sin embargo, Cristo también te regala el lunes, el
martes... ¡el viernes! y todo lo que tiene preparado para ti. Es hoy tu fin de
semana, tus vacaciones, y tu felicidad. Sólo tienes que descubrirlo en todo lo
que el Señor te ponga delante: en la reunión, cuidando a tu madre en el
hospital, en el trabajo, en el cuidado de los tuyos, en el trabajo, en tu
casa... La plenitud está en el amor.
Hoy el reto del amor es que pongas amor en todo lo que
hagas viéndolo como un regalo del Señor, como pequeñas misiones que Él tiene
preparadas para ti hoy.
VIVE DE CRISTO
Fuente:
Dominicas de Lerma