Providencia
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Leti nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
¿Te has
planteado alguna vez qué es la Providencia divina? Yo de joven no lo sabía ni
vivía de ello. Sin embargo, aquí en el convento, la he ido descubriendo poco a
poco.
La providencia
divina es experimentar que Cristo cuida de todo lo tuyo, que nada en tu vida es
casualidad, sino que todo está en sus manos.
A mí me gustan
mucho las pizzas, y el Señor lo sabe. Hace un tiempo me regalaron una harina
para hacer pizzas que no conocía. Me pareció muy curiosa: no solo contiene
harina, sino también levadura y masa madre natural en polvo. Toda una mezcla
para una aventura.
Me puse a
calcular el agua, la harina, la sal y el aceite, todo a mezclar. Salió una masa
increíble, solo faltaba dejarla reposar para después estirar y poner los
ingredientes. El resultado fue unas magníficas pizzas individuales caseras,
¡buenísimas!
Pues bien,
cuando piensas en la Providencia, crees que el Señor te mandará la pizza
directa para comer, y no es así muchas veces. Por un lado, te da los
ingredientes y por otro, tus manos para trabajar. Juntos hacemos el resultado
final.
El Señor te ha
cuidado en todo momento, te han regalado todo para poder hacerlo, pero a ti te
pide hacerlo. El Señor, en tu vida, te da todo para que seas feliz, para que
llegues al cielo, pero eres tú, y solo tú, en tu libertad, quien tiene que
acoger al Señor en tu vida.
Porque Él está,
somos nosotros los que tenemos que verle. Muchas veces tenemos una idea de cómo
tienen que ser las cosas. Y no, con el Señor eso no funciona. Él es muy
original, y siempre te va a salir por donde menos te lo esperas, pero siempre
te sorprende para tu bien.
Hoy el reto del
amor es descubrir la providencia del Señor en tu vida. Pídele descubrirle en lo
que estás viviendo. En tu presente está el Señor.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
23 julio 2025
Fuente: Dominicas de Lerma
