Sorprendente dato en EE.UU.: los expertos lo atribuyen a la necesidad de «seguridad»
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Foto: Priscilla du Preez / Unsplash. |
"¡Acompáñame
a comprar mi primera Biblia! ¡Estoy tan emocionada de leerla y estudiarla
por fin a mis 28 años...!": así es como sorprendió a sus seguidores (más
de un millón en TikTok) la influencer Cely Vázquez, ex
concursante del reality Love Island USA: "Chicos, ¿os
podéis creer que, literalmente, crecí en la iglesia?".
El caso de
Cely no es único: es una tendencia comercial
Cely es de
origen católico, a tenor de las imágenes que comparte de su
adolescencia, cantando ante una imagen de la Virgen de Guadalupe:
"Rezo todos los días y me considero una persona religiosa, pero nunca
había comprado mi propia Biblia ni la había leído ni estudiado. Pero ahora,
a mis 28 años, me encuentro con un deseo más profundo de comprender realmente
lo que significa caminar con Dios. Y creo que eso empieza por leer y estudiar
la Biblia. Ese será mi próximo paso. Por eso estoy tan feliz de estar
aquí", confiesa antes de entrar, móvil en mano para grabar el momento
y compartirlo, en una librería de la cadena Barnes &
Noble.
El caso de Cely
es bastante ilustrativo de la tendencia comercial que refleja un reciente
artículo de Jeffrey A. Trachtenberg en el Wall Street Journal: la venta de Biblias se
ha disparado en Estados Unidos en los últimos años en porcentajes realmente
llamativos, que se sintetizan en dos datos:
-de 9,7
millones en 2019 a 14,2 millones en 2023, un crecimiento del 46% en
cuatro años;
-una venta de
13,7 millones de Biblias en lo que va de 2024, lo que supone un crecimiento
del 22% respecto al mismo periodo del año pasado.
Los datos
proceden de Circana Bookscan, la principal herramienta del país en
seguimiento estadístico de ventas del mercado editorial. E indican que el
incremento de ventas general de libros a lo largo de los diez primeros meses
del año es del 1%, es decir, el de Biblias multiplica por más de veinte ese
crecimiento.
Causas
políticas...
Y eso que
Circana Bookscan no incluye en sus listados una edición que probablemente está
recibiendo en sus ventas el impacto de ser publicitada por Donald Trump la
primavera pasada. Se trata de la Biblia que patrocina su amigo el
cantante Lee Greenwood, autor del tema God Bless the USA que
da nombre a la God
Bless the USA Bible, cuya edición King James (de
origen anglicano y típica del ámbito protestante anglófono) añade al volumen la
Constitución, la Declaración de Independencia y otros textos puramente civiles.
El respaldo
de Trump a la Biblia patrocinada por Lee Greenwood.
Tras lamentar
-en el vídeo con el que promocionó la Biblia de Greenwwod- que Estados Unidos
se haya alejado del cristianismo como uno de los principales problemas del
país, Trump añade: "Todos los estadounidenses necesitan una Biblia en su
hogar. Yo tengo muchas, es mi libro favorito. Esta Biblia nos
recuerda que lo fundamental que tenemos que devolver a Estados Unidos
para Make America Great Again es nuestra religión.
Debemos defender la presencia de Dios en la plaza pública. Debemos hacer que
Estados Unidos rece de nuevo: Make America Pray Again".
...y causas
más personales
Sin embargo, ni
la tradicional identificación del sistema político estadounidense con el
cristianismo protestante ni el contundente triunfo de Trump en las recientes
elecciones presidenciales justifican por sí solos este éxito de la venta de
Biblias. Influyen también el proceso de secularización y el
proceso de desintegración social por desestructuración familiar,
que causan ambos una pérdida de referencias que los afectados
buscan subsanar de múltiples formas.
Bethany
Martin, gerente de la librería Faith & Life
Bookstore en Newton (Kansas), que vende las Sagradas Escrituras en
todo tipo de formatos y precios, señala que muchas de estas Biblias se están
vendiendo a personas que la compran por primera vez y
que "buscan esperanza ante la situación del mundo,
y la buscan en la Biblia".
Jeff Crosby,
presidente de la Asociación de Editores Cristianos Evangélicos, abunda en esa
línea de que "la gente siente ansiedad o preocupación por
sus hijos y nietos" en unos tiempos caracterizados por la inestabilidad
política y social y el riesgo de generalización bélica, "y todo eso
alimenta el deseo de tener la seguridad de que todo va a estar
bien". Acuden entonces a las certezas que ofrece la Palabra de Dios.
Las ventas se
están produciendo, señala el Wall Street Journal, tanto en
librerías religiosas como generalistas o en plataformas de venta on
line, y no solo en formato papel sino digital y en audiolibro. J.
Mark Bertrand, de Lectio (un
portal sobre la propia lectura de la Biblia), señala que también influye en las
ventas la mejora en los sistemas de márketing bíblico para responder mejor a un
nicho de personas que "anhelan el conocimiento y estudio de
las Escrituras".
Como resumía
Cely Vázquez al diario económico neoyorquino: "Sentía la necesidad de
empezar mi propio camino. Sentía que algo me faltaba, y que el sentido
de las cosas y esa tranquilidad pueden encontrarse en la Biblia".
C. L.
Fuente: ReligiónenLibertad