En el marco de su reciente viaje por América Latina, el Prelado del Opus Dei, Mons. Fernando Ocáriz, concedió una entrevista al diario El Mercurio de Chile, en la que habló sobre diversos temas, como el rol de las mujeres, la reforma ordenada por el Papa Francisco; y respondió a quienes consideran que el Opus Dei es “conservador, poderosos y hermético”.
![]() |
Mons. Fernando Ocáriz, Prelado del Opus Dei Crédito: Flickr Catholic Church England and Wales CC BY-NC-ND 2.0 |
“Dar
a conocer mejor lo que es la Obra [el Opus Dei], en parte, es tarea de cada
miembro: vivir de modo auténtico la propia vocación. Es algo grande y
maravilloso, aunque entiendo que se requiere una perspectiva de fe para
comprenderlo con profundidad”, agrega el prelado.
“De
todos modos, pienso que, humanamente, quien conoce de cerca el Opus Dei podrá percibir a
personas normales, con virtudes y defectos. Me gustaría que se nos conociera
como gente alegre, sencilla y serena, pacífica, con la que es fácil trabar
amistad, personas de mentalidad abierta y comprensiva”, prosigue.
Mons.
Ocáriz expresa luego su deseo de que “se reconociese la variedad de los fieles
del Opus Dei, y no solo a los pocos
que adquieren una cierta relevancia pública. Se vería así que cada uno y cada
una lucha por vivir a fondo la fe, conviviendo con sus propios defectos e
intentando poner sus talentos al servicio de su familia, sus amigos y de la
sociedad”.
El
prelado destaca también que “la principal aportación del Opus Dei es acompañar
a los laicos (98% de sus miembros) para que sean protagonistas de la misión
evangelizadora de la Iglesia en medio del mundo, uno a uno”.
El carisma
del Opus Dei y la reforma del Papa Francisco
Tras
señalar que el carisma del Opus Dei apunta a buscar a Dios y encontrarse con Él
“en la vida ordinaria, en el trabajo, en la familia, en la calle”, Mons. Ocáriz
recordó que San Josemaría, el fundador de la Obra,
decía que “cambian los modos de hacer y de decir, pero permanece la esencia, el
espíritu”.
“Saber
cambiar, en ese sentido, es necesario para ser fieles a una misión, pero se
debe modelar cualquier cambio desde lo esencial, desde ese núcleo que no
podemos modificar, porque, como todo carisma, es un regalo de Dios”, destacó.
En
julio de 2022 el Papa Francisco ordenó una reforma en el Opus Dei, a través del motu
proprio Ad
charisma tuendum (Para tutelar el carisma), con
la reforma de los estatutos de la Obra, un trabajo que se realiza en
coordinación con el Dicasterio para el Clero en el Vaticano, en un
ambiente de “diálogo y confianza”, según señaló el prelado en
junio de este año.
En
la entrevista, El Mercurio preguntó a Mons. Ocáriz si un joven de 16 años es
libre para decidir su vocación, a lo que el prelado respondió: “La libertad es
un requisito imprescindible para cualquier vocación. La incorporación al Opus
Dei solamente es posible a los 18 años, con la mayoría de edad”.
“Si
alguien piensa que tiene vocación, puede empezar antes un proceso de
discernimiento, pero sabiendo que no forma aún parte del Opus Dei y siempre con
el permiso expreso de sus padres”, continuó el prelado.
“Desde
el momento en que se pide la admisión en la Obra hasta su incorporación
definitiva, hay una serie de etapas formativas, que duran al menos 6 o 7 años”.
Cada
año, precisó Mons. Ocáriz “la persona debe manifestar su deseo de continuar: no
es un proceso automático, sino que interpela al discernimiento y a la libertad
personales de un modo muy profundo”.
Al
ser preguntado sobre el declive de las vocaciones en Chile, el prelado comentó
que “en los países más secularizados, compartimos las mismas dificultades que
el resto de la Iglesia”.
“En
los lugares donde esta crece, pienso en Nigeria, Brasil, Estados Unidos, el Opus Dei también crece.
En concreto, aumenta el número de laicos y laicas que, inspirados por San
Josemaría, desean buscar la santidad y están abiertos a formar una familia”.
El
prelado del Opus Dei lamentó luego la disminución de “las personas que acogen
el celibato, un don de Dios que quizá hoy se entiende menos, aunque sea tan
enriquecedor para la Iglesia”.
Sobre
la forma en la que la Obra afronta los casos de abusos, Mons. Ocáriz resaltó
que “desde 2013 existe en el Opus Dei un protocolo
para la protección de menores y personas vulnerables, que formaliza unas
medidas de prudencia que se vivían en la Obra desde hacía décadas e incorpora
la normativa más reciente de la Iglesia”.
Además,
“se está trabajando en la creación de canales especiales de sanación y
resolución para acoger a las personas que quieran ser escuchadas.
Al
hablar sobre el papel de las mujeres en la Iglesia, y en el Opus Dei
específicamente, Mons. Ocáriz resalta que “en las últimas décadas, la mujer ha
ido ampliando su espacio en la vida pública, enriqueciéndola con su aportación
insustituible. En la Iglesia ha crecido su protagonismo a todos los niveles,
también con nombramientos en puestos de responsabilidad dentro de la curia
vaticana, por ejemplo”.
“En el Opus Dei, las mujeres han estado
desde el inicio en el gobierno junto a san Josemaría y sus sucesores, y son
autónomas con respecto a los hombres en el liderazgo de sus apostolados”.
“Conforme
crece la presencia femenina en el gobierno de las empresas o instituciones, más
mujeres del Opus Dei, al igual que sus coetáneas, asumen puestos de
responsabilidad, y es bonito ver el alcance que su servicio puede prestar”,
destacó.
Por Walter
Sánchez Silva
Fuente: ACI