La verdad de la luna
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| Dominicas de Lerma |
Hola, buenos
días, hoy Sión nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
En la última
fiesta, nuestra priora nos hizo un regalo que me encantó: ¡¡un bloc de
post-its!!
Había varios
diseños. La priora comenzó a repartir de forma aleatoria y, de este modo,
terminé con un bloc de color azul. Era un tanto apagado, pero así destacaba una
preciosa luna llena sonriente. Y, aprovechando la forma redonda de la luna, el
diseño la convertía en una “o” dentro de la palabra “Love” (amor).
¡¡¡Cómo me
gustó el detalle!!! Y, esa noche, mirando por la ventana de mi celda, ¡la luna
me parecía diferente! ¡¡¡La luna me habla de amor!!!
Es realmente
precioso descubrir en las cosas cotidianas, del día a día, un sentido profundo,
escondido, un recordatorio de la comunión que nos une con el Resucitado. Ahora,
para mí, la luna es en realidad un pequeño mensaje, un suave “Te quiero”.
Al fin y al
cabo, ya dice el salmo que “el cielo proclama la gloria de Dios, el día al día
le pasa el mensaje, la noche a la noche se lo susurra… a toda la tierra alcanza
su pregón” (cf. sal 19).
Y,
efectivamente, ¡¡este mensaje llega a todo el mundo!! La misma luna que
contemplaré esta noche, ¡¡es la que puedes ver tú si te asomas a la ventana!! Y
también para ti será un “Te quiero”, “Estoy contigo”…
Cuántas veces
pasamos de largo ante estos mensajes, o los vemos sin detenernos ni un
instante… Sin embargo, cada día (¡y cada noche!), el Señor vuelve a engalanar
el cielo, porque su amor por ti es para siempre, porque mantiene viva la
esperanza de que un día verás… verás más allá.
Hoy el reto del
amor es disfrutar del firmamento. Deja que, con tus ojos, tu corazón vuele
hacia el Cielo. Descubre en esa belleza que el Señor te regala un mensaje de Su
amor. Feliz día… ¡¡¡y feliz noche!!!
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
14 agosto 2023
Fuente:
Dominicas de Lerma
