La memoria se
estructura en tres contenidos distintos: el anuncio de la fe, la celebración de
la fe y el compartir de la fe en la vivencia de la caridad
Datos de la Memoria Anual de Actividades de la Iglesia Española. |
En este documento
se da cuenta del destino que se dio a los 321,015 millones de
euros recibidos por ese concepto y también de toda la actividad realizada por
la Iglesia, en diócesis y congregaciones, a lo largo de este 2021.
En relación a la actividad realizada por
la Iglesia, la memoria se estructura en tres contenidos distintos: el anuncio
de la fe, la celebración de la fe y el compartir de la fe en la vivencia de la
caridad.
En el ámbito de la celebración, en 2021 el 67,2 % de los españoles se declaran católicos, 8.260.000 personas acuden regularmente a misa y participaron en los 9.545.952 de eucaristías que se celebraron ese año. En relación a los sacramentos, el 2021 es el año de la vuelta a la normalidad tras la pandemia en la administración de sacramentos, con un importantísimo incremento.
Se celebraron
149.711 bautizos frente a los 100.222 de 2020; 182.760 primeras comuniones
(20.810 más); 103.584 confirmaciones (24.137 más); y 25.762 matrimonios (el
doble que el año anterior). El retroceso de la covid se refleja
en el descenso de las unciones de enfermos. Si en 2020 fueron 29.627, en 2021 se quedaron en
27.045.
En el anuncio de la fe,
están implicados centenares de miles de fieles laicos entre voluntarios,
catequistas, profesores, etc. Los 16.126 sacerdotes en sus parroquias sumaron
28 millones de horas de trabajo en el año. Además, 10.382 misioneros españoles
trabajan repartidos por comunidades de todo el mundo a los que se suman las 542
familias en misión.
La labor educativa de la Iglesia es
imprescindible en nuestra sociedad. La iniciativa de los 2.548 centros
educativos católicos supone un ahorro para el Estado que asciende en
2021 a 4.356 millones de euros anuales. Son 461 millones más que el año
anterior, cuando la cifra fue de 3.895 millones. Es una educación que eligen
los padres de 1.509.280 alumnos cada año.
El patrimonio cultural, material
e inmaterial en España impacta positivamente en el PIB: aportando un 3
% al mismo. Hay 3.161 bienes de interés cultural (BIC) pertenecientes a la
Iglesia. Este patrimonio cultural, puesto al servicio de todos, genera una gran
riqueza cultural, celebrativa y económica también, con un impacto económico de
22.620 millones de euros: más del 3 % del PIB de España. Desde el punto de
vista del empleo, el patrimonio de la Iglesia supone una aportación de 225.000
empleos directos e indirectos.
En la vida de caridad y servicio, en 2021, 3.938.870 personas se
beneficiaron de la actividad de 8.864 centros asistenciales católicos. En los
últimos 10 años la actividad asistencial se ha incrementado en un 70 %. El
mayor número de centros de la Iglesia está destinado a la lucha contra la
pobreza, 6.300 centros, que atendieron a más de 2 millones de personas.
La promoción de la mujer ocupa un lugar destacado en la vida de
la Iglesia. Al igual que los centros para defensa de la vida y de la familia
que han atendido a 79.000 familias
Parte económica. La asignación tributaria
Una parte de la actividad de la Iglesia
es posible gracias a la asignación tributaria, la cual supone de media entre el
20 % y el 30 % de los ingresos de la economía diocesana. Esto es gracias a los
españoles que reconocen y apoyan el esfuerzo de la Iglesia: 8,5 millones de
contribuyentes marcaron la X de la Iglesia en su declaración de la renta, de
las cuales 84.201 declaraciones fueron nuevas en relación al año anterior.
En cuanto al destino de la Asignación
Tributaria, el 80 % del importe recibido de la X va dirigido directamente a las
diócesis para sus necesidades. Una parte importante, además del mantenimiento
de las personas que sostienen la actividad, se destina a la conservación,
rehabilitación y construcción de este patrimonio. En 2021, las diócesis
destinaron a 477 proyectos la cantidad de 49.505.061 €. En los últimos años más
de 561 millones de euros.
Realización de la Memoria
La Memoria está encomendada y realizada
por la Oficina de Transparencia de la CEE y cuantifica la
presencia de la Iglesia en todas las áreas de actividad en que trabaja. Surge
del compromiso de transparencia y de rendición de cuentas ante la sociedad y
ante el Estado en el marco de colaboración previsto, de presentar cada año un
informe indicando a qué actividad se destina el importe que se recibe por esta
vía.
Desde comienzos de este sistema y desde
que se presenta esta memoria en 2010, se ha ido aumentando la información que
contenían estas páginas pasando de 77 indicadores o datos, o más de 300. Son
indicadores tanto económicos como de actividad.
Este proceso de transparencia que se
viene desarrollando ya desde hace varios años en la Iglesia tiene también un
proceso de revisión externa de toda la información que contiene la memoria, que
es auditada por PWC, para ofrecer una mayor calidad informativa.
Existe también un proceso interno de mejora continua en las diócesis que pone
en marcha diversos procesos de reporting, rendición de cuentas,
herramientas tecnológicas, revisiones de los sistemas contables en el que ya
han participado el 80 % de las diócesis españolas y más de 300 parroquias
Fuente:
El Debate