INTERPRETACIÓN
Dominicas de Lerma |
Estos días, en clase de órgano, hemos estado trabajando una partitura
que, en una traducción libre, podría titularse “Bosque tranquilo”.
Bueno, ese es el nombre original, pero, interpretada por mí,
perfectamente podríamos denominarla “Agonizando en el bosque”.
Lo curioso fue que, cuando en clase la tocó el profesor, sonaba
preciosa, ¡incluso alegre! Sonaba a “Paseando por un bosque mágico en un día
soleado”…
Siendo la misma partitura, ¡¡era totalmente diferente!! Eso es
precisamente lo que sucede con Cristo: no cambia nuestra realidad, nuestra
historia, pero quiere enseñarte a vivir lo mismo… ¡de manera absolutamente
distinta!
Él vino a llenar de amor cada acto, incluso los más pequeños. Y nos
regala una lista incontable de santos que han vivido este amor en las más
variadas circunstancias: consagrados, matrimonios, estudiantes… ¡Ellos nos
demuestran que, con Cristo, nuestra música suena diferente!
-Vas bien -comentó el profesor al terminar- Solo te falta mejorar el
ritmo.
No imaginas lo que me ayudaron esas palabras. Y creo que son las que
Cristo quiere regalarte: cada vez que apuestas por amar con tus dones, con tus
circunstancias, Él susurra: “Vas bien…” con una sonrisa.
Hoy el reto del amor es poner en manos de Cristo tu partitura. Te
invito a que, en tu oración, le presentes esa circunstancia o esa persona que
no termina de “sonarte bien”. Deja que te indique cómo amar, tal vez con una
sonrisa, o un silencio acogedor, o un detalle… Cristo sabe el ritmo adecuado,
conoce las notas, la clave… De Su mano, ¡sacarás la mejor melodía! ¡Feliz día!
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
19 febrero 2023
Fuente: Dominicas de Lerma