La Comisión Episcopal para las Misiones y Cooperación entre las Iglesias, junto a OMP organizan una tanda de Ejercicios Espirituales en la cuna del patrón de las misiones
Ecclesia |
"Fue el encuentro con el «creador» de los Ejercicios
Espirituales, San Ignacio de Loyola, lo que llevó al joven Francisco a escuchar a Dios, cambiar de vida y entregarse a su
amor". Por este motivo, la Comisión Episcopal para las Misiones y Cooperación entre las
Iglesias, junto a las Obras Misionales
Pontificias han convocado a jóvenes de hasta 32 años a pasar cinco días de esta Navidad, del 26 al 30 de diciembre, de ejercicios espirituales en la cuna del patrón de las Misiones, en Javier, en Navarra.
El director del secretariado de la Comisión para las Misiones
y director de OMP, José María Calderón, impartirá estos ejercicios, que se organizan por segundo año consecutivo,
con el trasfondo
misionero que supone la localidad de nacimiento del santo navarro. En "este incomparable escenario donde creció
san Francisco
Javier", explican, "intrépido misionero y
patrono de las misiones, podrán dedicar cinco días a encontrarse con Dios en la
oración y el diálogo con Él".
Descubrir "un proyecto de vida"
Como
dice el Papa Francisco hablando
de los ejercicios, quien los vive de modo auténtico "experimenta
la atracción, el encanto de Dios y vuelve renovado, transfigurado, a la vida
ordinaria, al ministerio, a las relaciones cotidianas, trayendo consigo el
perfume de Dios", sin duda la base para vivir la misión a la que cada
bautizado ha sido llamado. “El deseo de hacer algo por Cristo es una respuesta
grata a lo que Cristo ha hecho por mí”, dijo el Papa , “lo dice también San
Ignacio en los Ejercicios Espirituales: Él ha hecho todo por mí, y entonces yo
hago algo por Él. Pero comienza siempre Él primero. Es siempre Él el que se
acerca a nosotros. El misionero o la misionera son servidores que miran al
Señor”.
Como explica Cristina Blasco, del Consejo de Jóvenes de las OMP, que ha vivido ya tres experiencias de de #VeranoMisión en Ghana, Marruecos y Etiopía, "a veces es necesario parar antes de seguir andando y ver si me dirijo a mi destino o si tengo que recalcular la ruta, saber cuál es mi itinerario, para qué me ha puesto Él donde estoy, qué es lo que espera de mí. En definitiva, descubrir el proyecto de Dios en mi vida".
Fuente: Ecclesia