Tras los milagros en Italia obrados por intercesión de Santa Rosa de Lima y la canonización de esta santa en 1671, surgió en este país europeo una congregación de monjas dominicas en honor a la patrona de América, en donde cada integrante se llama Rosa.
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| Crédito: Abel Camasca - ACI. Dominio público |
La congregación Hermanas Dominicas de Santa Rosa de Lima fue
fundada en 1677 por Madre Giovanna Caterina Boldona, en Finalborgo, al norte de
Italia. Ella se quedó impresionada con la Santa del Nuevo Continente y
siguiendo su camino espiritual decidió entregar su vida a Dios junto a un grupo
de jóvenes en un convento.
“Nuestra Madre fundadora al oír la vida de Santa Rosa se enamoró mucho de su
carisma, de su vida, se entusiasmó y sintió el llamado a fundar una
congregación para que continuásemos lo que ella nos ha dejado, lo que ella nos
ha transmitido. Continuar con su obra de amor a Cristo, de esta entrega, y
también de amor a los hermanos”, describe Madre Rosa Mónica.
Asimismo, la priora resaltó que los milagros que se dieron en
Italia con intercesión de Santa Rosa de Lima hicieron que la Santa fuera muy
querida.
“Los milagros para su canonización propiamente fueron en Italia y
fueron numerosos. De los cuales se utilizaron cuatro. Sobre todo de señoras con
cáncer terminal, ya desahuciadas. En ese momento de mucho dolor, de mucho
sufrimiento, habían implorado a Rosa por ayuda y quedaban completamente sanas”,
cuenta la religiosa.
Asimismo describió un milagro que pidió el Papa Clemente X, antes
de que decidiera canonizarla.
“Inclusive el Papa Clemente X, antes de nombrarla Santa, él dijo: ‘Rosa, si
realmente eres Santa, me tienes que dar una señal. Yo quisiera ver llover
rosas’. Y el Papa sintió que se veía esta lluvia de Rosas. Muy convencido de su
santidad va a canonizarla”.
La hermana también especificó que su congregación está presente en
varios lugares de Italia y en Brasil, donde atienden en las favelas. Mientras
que en el Perú sirven a los más necesitados y se encuentran en el monasterio
que está al interior del Santuario de la santa, en el centro de Lima
Para terminar, la Madre Rosa Mónica señaló que Santa Rosa de Lima
es una referencia de santidad para muchos en la actualidad y que “ella nos
enseña a mirar a Cristo, caminar con Cristo y que cada día sea un acto de fe,
un acto de amor a Cristo”.
