Murió en 2006, a los 15 años de edad; fue beatificado en 2020
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| Acutis era un apasionado de la informática y creó un exitoso blog sobre Milagros Eucarísticos. |
El joven italiano Carlo Acutis tenía solo 15 años cuando una leucemia
acabó con su vida. A pesar de su corta edad, este "influencer" de
Dios no desaprovechó ni un minuto de su camino. Beatificado el 10 de octubre de
2020 en Asís, donde se pueden visitar sus restos de forma permanente
desde este pasado uno de junio, Carlo supone hoy un ejemplo de santidad para muchos jóvenes y
adolescentes en todo el mundo que ponen la mirada en la devoción que profesaba
por Jesús, la Virgen y la Eucaristía.
Aficionado a los videojuegos y a la informática, Carlo Acutis,
fallecido en 2006, era un joven de su tiempo que le gustaba viajar y estar con
sus amigos, con el condimento necesario de hacerlo siempre con la presencia De
Dios cercana. Así lo plasmó en su admirable exposición online sobre
milagros eucarísticos y en una
serie de pensamientos y frases que dejó en herencia para todos.
El Profesor italiano de Literatura latina y griega, Francesco
Polopoli, ha recogido en un particular "abedecedario espiritual" algunas de
las principales motivaciones que movieron en vida al joven Carlo.
El libro Pensamientos y palabras de Carlo
Acutis (Ciudad Nueva), con prólogo del obispo de Nicosia
(Sicilia) Giuseppe Schillaci, invita
a los cristianos a replantearse la existencia y a escuchar la voz de Dios a
través de un pensamiento del beato por cada letra del abecedario.
1. La "A" de
"Autopista" hacia el cielo
El joven Carlo resumió con una brillante frase lo que llegaría a
encarnar él mismo con su propia vida: "la Eucaristía es mi autopista hacia
el cielo". Para el beato es necesario que el cristiano parta de un punto
concreto, de una situación vital determinada, de asumir una realidad personal,
y "aprovechándose" del regalo de la Eucaristía para poder llegar un
día al encuentro definitivo con Dios. "Cada comunión nos acerca a la meta de la santidad",
aseguraba Carlo. Se trata, por tanto, de un caminar como peregrinos en una
conversión constante, incluso cuando llegan los momentos de sufrimiento, como a
él mismo le ocurrió.
2. La "G" de
"Gracias" a la Eucaristía
Acutis, ya desde su enfermedad, siempre soñó con alcanzar el cielo
sin pasar por el Purgatorio. Solía decir: "van directos al Paraíso
aquellos que todos los días se acercan a la Eucaristía". Para el beato
italiano, ser cristiano es, sobre todo, vivir de la gracia. Dios, afirmaba
Carlo, "es la Verdad, y esta no necesita palabras, se expresa por sí
misma. Revela por sí misma toda la verdad. La voz del hombre es dura,
prepotente, arrogante, soberbia, impaciente, intratable, incluso, violenta.
Pero acostumbrase a la voz
de Dios es una gracia grande. Significa estar atentos a la Verdad".
Una palabra ordinaria como es "gracias" se convertía,
para él, en un signo indeleble de amistad, belleza y reconocimiento a Ese que
te lo da todo.
3. La "J" de los
"Jeans" del beato
Carlo nació en 1991 y murió en 2006, fechas tan recientes para un
beato que sorprenden a cualquiera. Y, es que, el joven italiano, como cualquier
muchacho de su época, más bien, de esta época, vestía con unos modernos pantalones vaqueros y unas zapatillas.
Las sandalias franciscanas y los hábitos benedictinos, para él, eran algo que
quedaba para las películas.
Carlo Acutis era, además, un deportista que se entrenaba en el gimnasio de Dios. Su
corazón era el músculo del alma. Se necesitaba poco para endurecerlo pero
también poco para ablandarlo. Solo
era necesario querer entrenar y Dios hacía todo lo demás.
4. La "S" de
"Santificación" por "sustracción"
"La santificación no es un proceso de adición sino de
sustracción. Tengo que ser
menos yo para dejar espacio a Dios", con esta frase, formulada
por él mismo, Carlo se sumergía en la vida ordinaria de un chico propio de su
edad. Ya fuera en la pizzería del barrio o jugando al fútbol con sus amigos, de
etnias y religiones muy distintas, Acutis regalaba a todo el que lo quisiera el "kit de la
santidad": Eucaristía, Rosario, y una porción de Biblia diaria,
confesión semanal, la disponibilidad de renunciar a algo por los demás y tener
el deseo de la propia santidad. Eran tal las ganas de ir al Paraíso, para el
joven beato, que en el blog que creó llamaba a los santos sus "amigos en
el cielo".
5. La "Z" del
"Zig-zag" del cristiano
La vida de Carlo Acutis fue un trayecto corto y lleno de curvas.
Sin embargo, gracias a su enfermedad, el joven beato descubrió muy pronto que los caminos accidentados son para el
cristiano oportunidades para discernir. Las curvas y encrucijadas, entendía
él, hacen comprender mejor que la existencia tiene lugar más allá de los
propios límites. Los meandros de la vida pueden servir para que uno se pierda,
pero es en esa distracción
cuando se alcanza la belleza de ser encontrados por el Creador. Para Carlo
también era importante tener siempre un deseo sincero de tener actitudes en
línea recta en medio de una existencia que ya de por sí sería en zig-zag.
Juan Cadarso
Fuente: ReL
