Tarde de limpieza
Dominicas de Lerma |
Hola, buenos días, hoy Sión nos lleva al Señor. Que
pases un feliz día.
El viernes por la tarde hicimos la limpieza del
monasterio (y así tener libre el día de ayer para celebrar a Santa María, Madre
de Dios). Ahí estuve yo, limpiando las escaleras, la ropería… y, cuando
terminé, aprovechando que aún no había anochecido, salí a la huerta. ¡Hacía un
montón que no paseaba! Disfruté tanto del sonido de los pájaros, el olor de la
hierba mojada…
Al regresar, como todavía me quedaban unos minutos, me
fui a ensayar al órgano de la capilla para, acto seguido, subir a mi celda a
vestirme para vísperas.
Cuando bajé de nuevo a la capilla, descubrí a todas
las monjas revueltas como hormigas antes de una tormenta.
¡Horror! ¡¡Había barro por todas partes!! ¡¡¡Había
sido yo!!! En el paseo me había manchado las suelas… ¡¡y se me había ido
cayendo por la capilla!!
Lo mejor fue que, reconocida la autora del delito,
todas jugaron a “recomponer” mi recorrido: había entrado, había saludado al
Señor, había subido la escalera a por los libros… ¡¡Estaban dibujados todos mis
pasos con montoncitos de arena!!
La investigación hizo que todas acabásemos riendo… ¡¡y
he descubierto que así es nuestro día a día!!
Sin darnos cuenta, vamos dejando rastro por donde
pasamos. ¿Cómo es el tuyo?
Ojalá que, al volver la vista atrás cada noche, puedas
descubrir que, por donde has pisado, no has dejado barro, sino amor. ¡Que tu
senda se dibuje no con montoncitos de arena sino con gestos de cariño!
Pero, ¿cómo lograr eso, si somos tan pequeños y
frágiles? ¡¡Pues igual que sucedió con mis suelas!! Con estar un rato en la
huerta, se llenaron del barro que luego fueron soltando. Del mismo modo, al
dedicar un rato al Señor, nuestro corazón se llena de Su amor, ¡para después ir
entregándolo!
¡La clave está al principio! ¡¡Llenarte de Él antes de
comenzar!! Y, cuando tu corazón rebosa, irás “dejando huella” sin ni siquiera
darte cuenta…
Hoy el reto del amor es parar con Cristo unos minutos
antes de comenzar la jornada. Te invito a que dediques un rato a estar con el
Señor, disfrutando, simplemente, de saber que eres precioso a sus ojos, ¡¡que
es capaz de todo por estar a tu lado!! Deja que tu corazón se empape de Su
amor… ¡y a caminar! ¡Feliz día!
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
02 enero 2022
Fuente: Dominicas de Lerma