A través de los años, santos y teólogos han validado la existencia del Purgatorio y estos 11 pasajes de la Biblia los respaldan
Representación del Purgatorio. Créditos: Lawrence OP (CC BY-NC-ND 2.0) |
El Catecismo de
la Iglesia Católica señala que el Purgatorio es una “purificación final” que
deben atravesar para llegar al Cielo todos aquellos “que mueren en la gracia y
en la amistad de Dios, pero imperfectamente purificados, aunque están seguros
de su eterna salvación”.
El autor y
apologista católico Dave Armstrong señaló en
un artículo publicado en National Catholic Register que Orígenes, San
Ireneo, San Ambrosio, San Agustín y San Jerónimo encontraron descripciones del
Purgatorio en la Biblia.
1.- Salmos
66:12
"Dejaste
que un cualquiera a nuestra cabeza cabalgara, por el fuego y el agua
atravesamos; mas luego nos sacaste para cobrar aliento”.
Armstrong
indicó que Orígenes y San Ambrosio consideraban que este salmo hace referencia
al “agua del bautismo y el fuego del Purgatorio”.
2.- Isaías 4:4
“Cuando haya
lavado el Señor la inmundicia de las hijas de Sión, y las manchas de sangre de
Jerusalén haya limpiado del interior de ella con viento justiciero y viento
abrasador”.
El apologista
recordó que San Agustín en el libro 20 capítulo 25 de la “Ciudad de Dios”,
interpreta este pasaje como una descripción del Purgatorio y resaltó que el
versículo anterior hace referencia a las personas salvadas.
3.- Miqueas 7:9
“La cólera de
Yahveh soportaré, ya que he pecado contra Él, hasta que Él juzgue mi causa y
ejecute mi juicio; Él me sacará a la luz, y yo contemplaré su justicia”.
Armstrong
señaló que “San Jerónimo consideró este versículo una clara prueba del
Purgatorio”.
4.- Malaquías
3:3
“Se sentará
para fundir y purgar. Purificará a los hijos de Leví y los acrisolará como el
oro y la plata; y serán para Yahveh los que presentan la oblación en justicia”.
El autor señaló
que “Orígenes, San Ireneo, San Ambrosio, San Agustín y San Jerónimo pensaron
que esta era una descripción del Purgatorio”.
5.- 2 Macabeos
12:44-45
“Pues de no
esperar que los soldados caídos resucitarían, habría sido superfluo y necio
rogar por los muertos; mas si consideraba que una magnífica recompensa está
reservada a los que duermen piadosamente, era un pensamiento santo y piadoso”.
“Los judíos
ofrecieron expiación y oración por sus hermanos fallecidos, quienes claramente
habían violado la ley mosaica. Tal práctica presupone el Purgatorio, ya que los
que están en el Cielo no necesitan ayuda y los que están en el Infierno ya no
pueden ser socorridos”, resaltó Armstrong.
6.- Mateo 5:22
“Pues yo os
digo: todo aquel que se encolerice contra su hermano, será reo ante el
tribunal; pero el que llame a su hermano ‘imbécil’, será reo ante el Sanedrín;
y el que le llame ‘renegado’, será reo de la gehenna de fuego”.
El autor
recordó que San Francisco de Sales comentaba sobre este pasaje que “es solo el
tercer tipo de ofensa que se castiga con el Infierno; por tanto, en el juicio
de Dios después de esta vida hay otros dolores que no son eternos ni
infernales; estos son los dolores del Purgatorio”.
7.- Mateo 5:26
“Yo te aseguro:
no saldrás de allí hasta que no hayas pagado el último céntimo”.
Armstrong
señaló que Tertuliano, San Cipriano, Orígenes, San Ambrosio y San Jerónimo
concuerdan que la “prisión” a la que hace referencia este versículo es el
Purgatorio y “el ‘céntimo’ representa los pecados más leves que comete el
hombre”.
8.- Mateo 12:32
“Y al que diga
una palabra contra el Hijo del Hombre, se le perdonará; pero al que la diga
contra el Espíritu Santo, no se le perdonará ni en este mundo ni en el otro”.
El autor señaló
que si el pecado contra el Espíritu Santo “no puede ser perdonado después de la
muerte, se sigue que hay otros que pueden serlo”, los cuales se limpian en el
Purgatorio.
9.- 1 Corintios
3:11-15
“Pues nadie
puede poner otro cimiento que el ya puesto, Jesucristo. Y si uno construye
sobre este cimiento con oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, paja, la
obra de cada cual quedará al descubierto; la manifestará el Día, que ha de
revelarse por el fuego. Y la calidad de la obra de cada cual, la probará el fuego.
Aquel, cuya obra, construida sobre el cimiento, resista, recibirá la
recompensa. Mas aquel, cuya obra quede abrasada, sufrirá el daño. Él, no
obstante, quedará a salvo, pero como quien pasa a través del fuego”.
Armstrong
recordó que San Agustín indica en la “Exposición sobre el Libro de los Salmos”
que los hombres “se salvarán, sin duda, después de la prueba de fuego, pero esa
prueba será terrible, ese tormento será más intolerable que todos los
sufrimientos más insoportables de este mundo”.
10.- Hebreos
12:14
“Procurad la
paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor”.
“Incluso
suponiendo que se permitiera que un hombre de vida impía entrara al Cielo, no
sería feliz allí; de modo que no sería misericordioso permitirle entrar. Hay
una enfermedad moral que trastorna la vista interior y el gusto; y ningún
hombre que trabaje bajo él está en condiciones de disfrutar lo que las
Escrituras llaman la plenitud del gozo en la presencia de Dios”, señaló San
John Henry Newman.
11.-
Apocalipsis 21:27
“Nada profano
entrará en ella, ni los que cometen abominación y mentira, sino solamente los
inscritos en el libro de la vida del Cordero”.
El autor señaló
que el historiador de la Iglesia Protestante, Philip Schaff, indicaba que
“estos puntos de vista del estado medio en relación con las oraciones por los
muertos muestran una fuerte tendencia a la doctrina católica romana de
Purgatorio”.
Fuente: ACI Prensa