El Arzobispado de Barcelona anunció la realización, el próximo 22 de octubre desde las 17:00 (hora local) de la I Jornada de campanología Vivos Voco (Yo llamo a los vivos), que albergará la Facultad Antoni Gaudí de Historia, Arqueología y Artes Religiosas.
Foto referencial. Crédito: Pixabay |
La
nota del Arzobispado recuerda que “a lo largo de la historia, la campana ha
tenido un papel importante para la mayoría de religiones que la han considerado
un instrumento muy útil entre los elementos semióticos del lenguaje ritual, el
cual permite a las personas la comunicación con la divinidad”.
“El sonido de la campana eleva la voz
del pueblo a su Dios y llama a su encuentro”, agrega.
El
Arzobispado resalta que en la jornada del 22 de octubre se tocarán diversos
“temas relacionados con la conservación preventiva y la restauración de los
conjuntos de campanas de Barcelona”.
“También
se darán algunas claves que se han tenido en cuenta para afrontar
intervenciones en los campanarios, con la voluntad que empresas de instalación
e instituciones puedan disponer como herramienta y marco de trabajo”, agrega el
texto.
Asimismo,
“se mostrarán aspectos que generan a menudo controversia como por ejemplo el
impacto sonoro sobre la población y la legislación existente sobre esta
cuestión”.
“Todo
forma parte de una mirada diferente ante el instrumento de la campana, una
mirada más técnica”, resalta la nota.
Las
campanas de las iglesias han permitido, en los últimos tiempos, diversas
expresiones de fe y esperanza.
En
marzo de 2020 la Conferencia Episcopal Española alentó a las diócesis del país
a tocar las campanas para pedir a Dios el fin de la pandemia del coronavirus.
En
agosto del mismo año, el ayuntamiento de la ciudad cordobesa de Lucena, España, defendió el tañido de las campanas de sus iglesias como
un elemento característico de la “realidad cultural” del pueblo y respaldó su
uso “para los actos religiosos”, en respuesta a una campaña de firmas de
algunos vecinos que exigían la limitación del toque de campanas.
En
octubre, también de 2020, un reconocido sacerdote exorcista de Estados Unidos
explicó que el demonio odia “todo lo bello” y santo, y por
ese motivo, también odia las campanas que doblan durante la celebración de la
Misa, así como las que él utiliza durante los rituales de exorcismo.
“El
diablo odia todo lo bello y las campanas se usan específicamente para llamar la
atención sobre la adoración divina de Dios. Los demonios odian las campanas, la
cuales utilizo en sesiones (de exorcismo) todo el tiempo”, dijo entonces un
sacerdote identificado como P. Theophilus, a la periodista Patti Armstron
del National Catholic Register.
La
jornada del 22 de octubre es promovida por el Arzobispado de Barcelona, la
Catedral de Barcelona, el Grupo de Investigación Campanológica de Barcelona
(GRCB) y la Asociación de Campaneros de Santa María del Pi.