Este año, debido a las normas restrictivas impuestas a causa del coronavirus, el Santo Padre y sus colaboradores de la Curia Romana no podrán “participar juntos” del tradicional encuentro espiritual al inicio de la Cuaresma
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Portada del libro: Abbi a cuore il Signore |
“Este año no
tendremos la gracia de poder contar con un Predicador de los Ejercicios. La
situación actual impide la reunión de personas y por ello no podremos ir juntos
a la Casa de Ejercicios”, lo escribe el Papa Francisco en la Carta que acompaña
al libro, “Abbi a cuore il Signore”, que ha querido regalar a los
Cardenales residentes en Roma, a los Jefes de los Dicasterios y a los
Superiores de la Curia Romana, quienes habitualmente acompañaban al Pontífice
en los Ejercicios Espirituales de la Curia Romana, en la “Casa Divin
Maestro” de la localidad italiana de Ariccia.
Unidos en la oración los unos por los otros
Este año, debido a las normas restrictivas impuestas a causa
del coronavirus, el Santo Padre y sus colaboradores de la Curia Romana no
podrán “participar juntos” del tradicional encuentro espiritual al inicio de la
Cuaresma. Por ello, el Papa Francisco los anima a que, cada uno de ellos tome
esos días para hacer los Ejercicios Espirituales donde le sea más conveniente.
“Yo también me uniré a todos – afirma el Pontífice – haciendo los Ejercicios
aquí”. Y para expresar esta unión, el Papa ha pensado en enviar a cada
uno de sus colaboradores el libro: Abbi a cuore il Signore (Ediciones
San Pablo, editado por el Padre Daniele Libanori), con la esperanza de que
pueda ayudarlos en su vida espiritual.
Un manuscrito del siglo XVII
El Maestro di San Bartolo, ciertamente monje de un
monasterio del mismo nombre, es el autor del volumen Abbi a cuore il
Signore (Tened al Señor en el corazón). Se trata de un antiguo manuscrito
– una especie de colección de notas en hojas sueltas escritas a mano en latín
eclesiástico – que data probablemente del siglo XVII y que se encontró en
Ferrara, Italia, en uno de esos mercadillos que suelen deparar sorpresas
inesperadas. En el prefacio, el padre Libanori dice estar convencido de que se
trata de apuntes para uso personal en la predicación destinados por el Maestro
de San Bartolo a varios discípulos. El escrito también es rico en meditaciones
y notas con numerosas referencias bíblicas. "Lo que se puede extraer de
estas notas – escribe el Padre Libanori en el prefacio – es una sabiduría de
sentido común, pero no carente de interés. Ciertamente están fechados no menos
que el lenguaje, pero documentan una sensibilidad y experiencia de la Iglesia
en la dirección espiritual". En el volumen hay también un pequeño tratado
sobre los pecados capitales. Todo ello contribuye a crear, tantos años después,
una lectura útil", concluye el padre Libanori, "para superarse a sí
mismo e ir más rápidamente hacia Dios".
Ejercicios Espirituales de forma personal
Tal como lo había anunciado la Oficina de Prensa de la Santa
Sede, el pasado 20
de enero de 2021, “dada la persistencia de la emergencia sanitaria, este
año no será posible vivir comunitariamente los Ejercicios Espirituales de la
Curia Romana en la Casa Divin Maestro de la localidad italiana de
Ariccia. El Santo Padre ha invitado por lo tanto a los Cardenales residentes en
Roma, a los Jefes de los Dicasterios y a los Superiores de la Curia Romana a
hacerlos personalmente, retirándose en oración, desde la tarde del domingo 21
al viernes 26 de febrero”. Asimismo, recordamos que durante esa semana se
suspenderán todos los actos del Santo Padre, incluida la Audiencia General del
miércoles 24 de febrero.
Ciudad del Vaticano
Vatican News