“Instamos enérgicamente al presidente a rechazar el aborto y promover la ayuda que defienda la vida de las mujeres y las comunidades necesitadas”
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Joe Biden. Crédito: Gage Skidmore (CC BY-SA 2.0). |
En una entrevista a Catholic World Report, Mons. Naumann
señaló que “el presidente debería dejar de definirse a sí mismo como un
católico devoto y reconocer que su punto de vista sobre el aborto es contrario
con las enseñanzas de la moral católica”.
“Sería un enfoque más honesto de
su parte decir que está en desacuerdo con la Iglesia en este importante tema y
que está actuando en contra de la enseñanza de la Iglesia”, agregó.
“Lo que está haciendo ahora es
usurpar el papel de los obispos y confundir a la gente. Está declarando que es
católico y va a obligar a la gente a apoyar el aborto con el dinero de sus
impuestos. Los obispos deben corregirlo, ya que el presidente está actuando en
contra de la fe católica”, subrayó.
Mons. Naumann, como presidente
del Comité de Actividades Provida de la Conferencia de Obispos Católicos de los
Estados Unidos (USCCB), emitió un comunicado con la respuesta de los obispos a
la declaración de Biden del 22 de enero en la que respalda el aborto legal en
el aniversario del fallo Roe vs. Wade, que abrió la puerta a la legalización de
esta práctica.
“Instamos enérgicamente al
presidente a rechazar el aborto y promover la ayuda que defienda la vida de las
mujeres y las comunidades necesitadas”, señalaron los prelados.
En los primeros días de su
gobierno, Biden derogó la Política de la Ciudad de México, que prohíbe el
financiamiento federal de ONG extranjeras que promueven o realizan abortos como
método de planificación familiar. Con la vicepresidenta Kamala Harris, Biden ha
enfatizado su compromiso de nombrar jueces federales favorables al aborto y de
codificar los precedentes judiciales a favor del aborto en la ley federal.
Mons. Naumann resaltó la acción
del P. Robert Morey, un sacerdote de Carolina del Sur que se negó a dar la
Sagrada Comunión a Biden en una Misa en 2019 debido a su postura sobre el
aborto.
El Prelado indicó que el P. Morey
estaba “siguiendo su conciencia" y que “el presidente tiene la
responsabilidad de no presentarse a la Sagrada Comunión”.
“Cuando los católicos reciben la
Eucaristía, están reconociendo la Presencia Real de Jesús y también creen en
las enseñanzas de la Iglesia”, señaló. “El presidente Biden no cree en las
enseñanzas de la Iglesia sobre la santidad de la vida humana, y no debe poner
al sacerdote en una situación en la que tenga que decidir si le permite o no
recibir la Eucaristía. Él debería saber eso después de 78 años como católico”,
agregó.
Mons. Naumann también señaló que
su “mayor preocupación” es la posible eliminación de la Enmienda Hyde, que
prohíbe la financiación federal de abortos voluntarios.
Durante las elecciones de 2004,
los obispos estadounidenses emitieron la declaración “Católicos en la vida
política” que daba a los sacerdotes la decisión de negar la Sagrada Comunión a
los políticos proaborto.
Ese mismo año, el entonces
Cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la
Fe, envió una carta a Theodore McCarrick, entonces Arzobispo de Washington, con
la expectativa de que se la leyera a sus compañeros obispos.
La carta decía que los políticos
a favor del aborto, después de haber sido amonestados por su pastor sobre las
enseñanzas de la Iglesia y advertidos en contra de presentarse a la Comunión,
“no deben ser admitidos a la Sagrada Comunión”.
Mons. Naumann también habló en la
entrevista sobre la Marcha por la Vida, la propuesta de enmienda constitucional
de Kansas para rechazar una decisión de la Corte Suprema estatal sobre el
"derecho" al aborto, la permisibilidad ética de las vacunas y si su
uso debería ser obligatorio, y la Ley de Igualdad federal, una propuesta
legislativa que podría coaccionar a las instituciones religiosas para que
actúen en contra de sus creencias religiosas.
Traducido y adaptado por Harumi
Suzuki. Publicado originalmente en CNA.
Fuente: ACI Prensa