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Gabriela Romanoski de Andrade. Créditos: Camila Hampf Mendes |
Además, resaltó que el “testimonio de fe,
amor y esperanza de Gabi alcanzó a Brasil y el mundo” e indicó que la pequeña,
que “quería recibir a Jesús a través de la Eucaristía, ahora está en los brazos
del Buen Pastor, junto a Dios”.
Gabriela se estaba preparando para recibir
la Primera Comunión, sin embargo, no pudo seguir con el proceso al ser
hospitalizada desde inicios de octubre en Curitiba por complicaciones de su
estado de salud.
La niña padecía una miocardiopatía,
enfermedad que causa una alteración en el músculo cardiaco, impidiendo al
corazón funcionar de forma correcta.
A pesar de su estado, Gabriela mantenía su
sueño de recibir a Jesús Eucaristía, por lo que, el equipo del hospital realizó
todas las coordinaciones para tener una celebración en la misma institución
médica.
Durante la Misa fue presidida por el
Arzobispo de Curitiba, Mons. José Antonio Peruzzo, la niña recibió la Primera
Comunión y la Confirmación, y tuvo como padrino al mismo Mons. Peruzzo.
Este lunes, al informar sobre el
fallecimiento de la niña, la parroquia pidió oraciones “por la familia de Gabi
y por su descanso”.
Traducido y adaptado por Harumi Suzuki.
Publicado originalmente en ACI Digital.
