FAMILIA CON UN DIÁCONO, UN SEMINARISTA Y DOS SACERDOTES EVANGELIZA LAS REDES SOCIALES

En el 2011, su padre fue ordenado diácono permanente y en el 2012 Ronal fue ordenado sacerdote. Posteriormente Andrés fue ordenado presbítero en el 2016 y Jorge, el más pequeño de los cuatro hermanos, cumplirá a fines de 2020 seis años de formación en el mismo seminario

De izquierda a derecha: Jorge Pulido (seminarista),

P. Andrés Pulido (sacerdote), P. Ronal Pulido (sacerdote)

y Gerardo Pulido (diácono permanente). Créditos: P. Ronal Pulido
El P. Ronal Mauricio Pulido Martínez es un sacerdote colombiano de 35 años conocido por evangelizar a través de Youtube junto con su hermano que también es sacerdote, otro que es seminarista, y con su padre que es diácono permanente.

El P. Ronal, que también tiene una hermana y cuya madre falleció en 2008, reside en Bogotá (Colombia).

En declaraciones a ACI Prensa, el P. Ronal relató que las vocaciones que se formaron en su familia y en su pueblo natal llamado La Tulia, Valle del Cauca (Colombia), de unos tres mil habitantes, fueron fruto de los grupos de oración y adoraciones al Santísimo Sacramento que  el P. Juan Carlos Narvaez fundó en los años 90.  

El sacerdote contó que sus padres asumieron un gran liderazgo de estos grupos de oración, tanto que entre el 2001 y 2002 su padre, Gerardo Pulido, fue llamado por el párroco a iniciar sus estudios para el diaconado permanente en la Diócesis de Cartago, en Cali.

Durante la etapa de formación de su padre “se fue sembrando la semilla de la Palabra de Dios” en su familia, por ello, luego de terminar la escuela secundaria, a los 17 años “me vinculé más estrechamente con el servicio parroquial”. Sin embargo, no fue hasta la vigilia del 2002 que Ronal sintió el llamado a la vocación sacerdotal.

Sentí “un compromiso fuerte con Dios de evangelizar, al punto que ayudaba a mi padre a predicar en los grupos de oración… y al cabo de un año de experiencia, a raíz de leer la vida de San Francisco de Asís, empecé a sentir el llamado… y empecé a discernir”. Así, en 2005, inició su formación en el seminario Siervos del Espíritu Santo, del movimiento de la Renovación Carismática.

En esa época, su hermano Andrés también participaba en la parroquia como catequista, lector y en los grupos de oración. “Le veíamos todo el perfil al sacerdocio…, pero él no estaba muy convencido, y poco a poco, fue madurando esa experiencia”, hasta que en el 2008 ingresó al mismo seminario que Ronal.

En el 2011, su padre fue ordenado diácono permanente y en el 2012 Ronal fue ordenado sacerdote. Posteriormente Andrés fue ordenado presbítero en el 2016 y Jorge, el más pequeño de los cuatro hermanos, cumplirá a fines de 2020 seis años de formación en el mismo seminario.

Con Jorge, ahora de 25 años, fue muy “curioso”, pues nació cuando el clima familiar era de mucha espiritualidad, tanto así, que su motivación para ir a la escuela era aprender a leer para poder leer la Biblia, y era usual verlo predicar desde muy niño, dijo el P. Ronal.



El P. Ronal recuerda que su hermano decía: “No se asombren que yo hable de Dios desde tan temprano, porque en mi casa, desde que yo tengo uso de razón, mi papá y mis hermanos... sus debates en el comedor son sobre teología... y entonces, siempre he escuchado hablar de la palabra de Dios”.

Debido a ello, el P. Ronal dijo que desde mucho antes de que Jorge expresara su deseo de ir al seminario, “ya en mi corazón yo sentía que él iba a ser llamado a la vocación sacerdotal, pero yo nunca le insistí, deje que todo fuera a su tiempo”.

El pueblo de la Tulia ahora es conocido como cuna de vocaciones. “Hemos pedido a los obispos que nos den el don de la ordenación en la parroquia Nuestra Señora del Carmen y eso ha motivado una vocación sacerdotal que no existía hace 17 años. Ahora es más común que haya vocaciones sacerdotales y religiosas”, señaló el P. Ronal.

Luego de su ordenación, el P. Ronal fue enviado para vivir sus primeros siete años como sacerdote en la Arquidiócesis de Santiago de los Caballeros en República Dominicana, donde sirvió por tres años como vicario y cuatro años como párroco de la parroquia Santa Lucía. Durante su estancia se graduó como psicólogo gracias a una beca y viajó a Estados Unidos, El Caribe, Guatemala y Perú como predicador.

El 2016, el P. Ronal inició su canal de Youtube, cuando ayudó a un amigo sacerdote a grabar audios con reflexiones del Evangelio enviadas por Whatsapp. Al regresar a República Dominicana, empezó a grabarse con una cámara de celular, y con el tiempo y el apoyo de su familia, obtuvo los recursos para evangelizar mejor.

Actualmente, Jorge es su brazo derecho en sus dos canales de youtube: “P. Ronal Mauricio Pulido Martínez”, donde difunden reflexiones del Evangelio, el rezo del Santo Rosario y la Coronilla de la Divina Misericordia, y “Red de Intercesión Católica Internacional”, que convoca personas de habla hispana para prepararlos en un curso de siete meses llamado “Escuela de Oración”, basado en el catecismo y la tradición de la Iglesia Católica.

Por su parte, el P. Andrés, que desde este año dirige la parroquia de los Sagrados Corazones de Jesús y María en la Arquidiócesis de La Paz (Bolivia), se sumó a apoyar en los canales de Youtube cuando se dio cuenta de la necesidad de evangelización de la gente, especialmente, durante la pandemia del COVID-19.

“A mi hermano, el P. Andrés no le llamaba mucho la atención [los medios virtuales]. Pero, realmente lo que ha logrado la integración de toda la familia en la evangelización digital ha sido la situación de confinamiento”. Así, logró integrar a su hermano, padre y hermana y “hoy tenemos programa diario en el primer canal y todos participan en un día asignado”, dijo.

En el segundo canal, con casi cinco mil suscriptores, “inauguramos un grupo de oración, donde predicamos con mis hermanos. Lo dirige cada uno. Yo hago la parte inicial, después mi papá entra con La Palabra, luego Jorge con la oración a partir del Evangelio y el P. Andrés dirige la oración de alabanza al final”.

El P. Ronal dijo que su madre, fallecida hace ocho años, también “evangeliza con nosotros porque hablamos mucho de ella, sobre el testimonio de todo lo que ella nos dio”.

El P. Ronal recuerda que cuando visitaron un monasterio, “la superiora llamó a mi madre por entre las rejas, le tomó de las manos y le dijo: ‘Señora, usted tiene un vientre sacerdotal. Nunca había visto algo tan increíble: su esposo es diácono y usted es madre de sacerdotes y vocaciones’”.

“Estamos evangelizando a través de los dos canales, ambos nos han unido mucho…el impacto ha sido intrafamiliar, la unidad, la comunión, la evangelización, ser un solo testimonio para la gente”, dijo.

El P. Ronal señaló que durante la pandemia su primer canal logró alcanzar el pico más alto de suscriptores. Dijo que los testimonios de sus seguidores expresan una gran “sed de evangelización” y, en ciertos casos, también comparten casos de conversiones de personas alejadas de la Iglesia.

“Al iniciar el año el canal tenía 14.500 suscriptores, y al día de hoy, en seis meses, vamos llegando a los 40 mil; es decir, que la gente está navegando en internet y está buscando a Dios. Es uno de los impactos positivos de la pandemia...nos ha hecho volver a Dios”, afirmó.

Además de su labor de evangelización virtual, desde este año el P. Ronal reside en Bogotá para enseñar en el Seminario Intermisional San Luis Beltrán, un seminario misionero que acoge a cerca de 100 jóvenes de entre 50 y 60 parroquias que pertenecen a las diócesis más distantes del país, ubicadas en la amazonía.

“En cada uno de estos muchachos…estoy edificando con la ayuda de los demás compañeros, los futuros párrocos que van a dar la cara por la Iglesia, por Jesús, en los próximos años”, en tiempos difíciles donde se busca atacar los dos pilares que Dios tiene para sostener el mundo: el sacerdocio, con los escándalos, y la familia, con la ideología de género, dijo.

A los sacerdotes y laicos que quieran evangelizar en redes, el P. Ronal les aconseja que tengan “la convicción de que detrás de esa cámara tú puedes llegar a la persona que menos lo esperas y que más lo está necesitando”. La parte técnica se va adquiriendo lentamente en la experiencia, añadió.

“Lo segundo, asesórese de alguien que sepa y tenga más experiencia. Con esos dos factores se llega muy lejos en esta evangelización. Estoy a la orden, si alguien necesita algún consejo me puede escribir a mi correo electrónico y yo lo apoyaré, porque estoy más que convencido de que esto es para compartirlo y que entre más cercanos seamos, más lejos llegamos”, concluyó.

POR CYNTHIA PÉREZ

Fuente: ACI