HOY EL RETO DEL AMOR ES HACER ALGO CON TUS MANOS QUE EXPRESEN EL AGRADECIMIENTO QUE TIENES A UNA PERSONA

Hazlo tú mismo

Hola, buenos días, hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

Hoy es el cumpleaños de nuestra Madre Priora. La tarde anterior al cumpleaños (ayer), en la sala de trabajo se recoge todo, y se ponen todas las mesas con los diferentes regalos. ¡¡Y este año, incluso pusimos un montón de globos que nos envió una amiga de la Comunidad!!

Nosotras no tenemos Amazon, ni Corte Inglés y, por ello, lo hacemos todo a mano, aquí, es todo artesanal.

Al ver las mesas, te encontrabas que cada una sacaba lo mejor que tiene. Por un lado, las hermanas que cosen han hecho muñecas, un camino de mesa, un neceser... Por otro lado, las que pintan, han decorado figuras de marmolina; las que diseñan en técnicas variadas, nos han sorprendido con un montón de tazas, bolsas, gamuzas... También está la de láser, haciendo en joyería imágenes de lo que le gusta a la Priora. Un sinfín de regalos, porque cada una ha puesto sus dones al servicio de la Comunidad, y ahora ves que todo se multiplica.

Es una gozada poder expresar con tus manos lo que tienes dentro y, sobre todo, cuando es para decirle a una persona que la quieres y que estás muy agradecida por todo lo que hace por ti. Porque el amor siempre es agradecido.

Nuestra Madre Priora tiene muchos dones, pero a mí, uno de los que más me impresiona es el don de servicio tan grande que tiene. No la ves sirviéndose del cargo; al revés, siempre está sirviendo a todas las hermanas, nunca tiene tiempo para ella, es la primera que, si una hermana no puede, se ofrece a sustituirla, y va a fregar, a trabajar a lo que sea...

El Señor le ha regalado el don del servicio, y ella lo ha acogido y se ha puesto en manos de Cristo. Esto es lo que Jesús nos dice en su Evangelio: si alguno quiere ser el primero, que sea el último y el servidor de todos.

Qué misterio hay en el servicio... porque, aunque a veces cuesta, luego tienes una alegría muy grande. Porque servir es amar.

Jesús, en su vida, una de las cosas que más vemos en Él es cómo servía, a Dios y a nosotros. Porque Jesús no se quedó en palabras, Él pasaba la palabra a las obras. Seguir a Jesús es don y tarea: todo lo recibimos de Cristo... para luego darlo.

Hoy el reto del amor es hacer algo con tus manos que expresen el agradecimiento que tienes a una persona y que se lo entregues. Déjate sorprender por el don del servicio.

VIVE DE CRISTO

Fuente: Dominicas de Lerma