PAPA FRANCISCO LLAMÓ A JOVEN DISCAPACITADO QUE LE CORRIGIÓ (Video)

El joven le escribió al Pontífice para reprocharle algo que hacía mal durante la misa en casa Santa Marta

A pesar del confinamiento debido a la pandemia de coronavirus, el papa Francisco sigue en contacto con el “pueblo de Dios”, realiza llamadas, escribe y recibe cartas de varios rincones del mundo. 

El pasado 29 de abril, en la misa diaria en Casa Santa Marta, en el Vaticano, el Pontífice citó en su homilía ‘la reprimenda’ que recibió de un joven discapacitado italiano, llamado Andrea, que le escribió para decir lo que estaba haciendo mal en la misa que preside todos los días para acompañar a los fieles durante el aislamiento preventivo por Covid-19 y trasmitida en streaming live.

En su homilía, destacaba como “los pequeños dicen lo que sienten, lo que piensan: todavía no han aprendido el arte de decir las cosas un poco envueltas para que se entiendan, pero no se digan. Este es un arte de los grandes, que a menudo no nos hace ningún bien”.

 “Ayer – continuó – recibí una carta de un chico de Caravaggio. Se llama Andrea. Y me dijo cosas sobre él: las cartas de los chicos, de los niños, son hermosas, por su concreción. Y me decía que había escuchado la misa en la televisión y que tenía que “reprocharme” una cosa: que yo diga “Que la paz esté con ustedes”, “y no puedes decir esto porque con la pandemia no podemos tocarnos”. No ve que ustedes hacen así con la cabeza y no se tocan”. El Papa aplaudió la libertad del joven Andrea de decir las cosas como son.

El Papa también llamó a la mamá de Andrea para agradecerle por la sinceridad y por las oraciones. Andrea y el Papa conversaron como amigos de una vida. “Te enviaré la papalina que me pediste en la carta, sigue adelante”.

En tiempos mejores, el joven discapacitado junto a su familia visitarán el Vaticano, así lo prometió Francisco. La madre de Andrea no lo podía creer, emocionada dijo que rezaba por el pontífice aunque si pensaba que no lo necesitaba porque ya era un “santo”, confirmado, según ella, por el gesto apenas cumplido con su hijo.  

Francisco que no ama ser considerado más que un ‘pecador muy amado’ con su humor le respondió a la señora: “Oh, Dios mío, bueno, no lo diga dos veces porque si no, nos veremos en el infierno”. Ciertamente, la frase sacada fuera de contexto comienza a ser causa de nuevos ataques dirigidos al Papa en Italia.


Ary Waldir Ramos Díaz 

Fuente: Aleteia