Entre otras medidas sería la retirada
del agua bendita de las pilas de las iglesias, prohibir el saludo de paz, así
como las muestras de afecto a la imágenes se cambien por inclinaciones de
cabeza o reverencias, para evitar el contacto físico con ellas
Imagen referencial. Crédito: Pixabay |
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de
España, anunció el plan de desescalada del confinamiento, que incluye el inicio
de la celebración de las misas con fieles en las iglesias. En su comparecencia
ante los medios, Sánchez subrayó que la desescalada será “asimétrica” y que
dependerá de cada una de la evolución de la pandemia en las provincias y
comunidades.
El
plan de desescalada está estructurado en 4 fases, de 0 a 3, que comienzan del
11 de mayo, cada fase tendrá una duración de 2 semanas y se podrá pasar a la
siguiente siempre que los indicadores sean favorables.
Actualmente
España se encuentra en la fase 0 de este plan de desescalada. En la fase 1,
previsiblemente el 11 de mayo, se volverán a celebrar misas con fieles, pero
que el aforo de las iglesias “deberá estar limitado a un tercio de su
capacidad”, durante la semanas que dure esta primera fase. En algunas islas de
Baleares y Canarias se podrá celebrar misa con fieles a partir del 5 de mayo,
pero siempre
Cuando se afronte la fase 2 de
desescalada, previsiblemente el 25 de mayo, las iglesias podrán estar al 50% de
su capacidad.
Según las previsiones del gobierno a
final del mes de junio, España podría haber completado la fase 3 y estar en “la
nueva normalidad”.
El Cardenal Juan José Omella, Arzobispo
de Barcelona (España) y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE)
aseguró el pasado domingo 26 de abril que ya había pedido al gobierno la
reanudación de la celebración de la misas con fieles.
Pero recordó la importancia de “ser
pacientes, rezar por la autoridades y colaborar con ellos. Todo con el fin de
evitar contagios, especialmente de las personas con más riesgos. Porque estamos
ante un virus con una gran potencia de contagio y a veces no parece que somos
conscientes de ello”.
Además de las medidas de distanciamiento
social necesarias y el respeto de la capacidad de los templos, también es muy
probable que se continúe con la medidas de prudencia que se adoptaron al inicio
del mes de marzo.
Es decir; la retirada del agua bendita de
las pilas de las iglesias, prohibir el saludo de paz, así como las muestras de
afecto a la imágenes se cambien por inclinaciones de cabeza o reverencias, para
evitar el contacto físico con ellas.
Fuete:
ACI